El rey Felipe VI, si bien no es conocido por su pasión por los coches como lo fue su padre, el rey Juan Carlos I, tuvo un primer automóvil que marcó sus inicios al volante. En 1986, a los 18 años, obtuvo su licencia de conducir y recibió un regalo muy especial por parte de la Casa Real: un SEAT Ibiza SXi. Este no era un Ibiza común, sino una versión especial preparada por la marca española sobre un GLX.
La elección de esta marca no fue algo al azar. Estaba planeado que el monarca tenga como primer vehículo uno perteneciente a una firma nacional. Algo muy habitual en otras monarquías como la Británica, en la cual durante años solo podían conducir modelos construidos ahí, y también de la Países Bajos, entre otras. Todo para convertirlo en un símbolo representativo del país.
¿Qué características tenía el SEAT de rey Felipe VI?
El SEAT Ibiza SXi del rey Felipe VI presentaba características únicas, como un color de carrocería dorado metalizado, no disponible en el catálogo de pinturas de la marca, y una matrícula M-9825-GU. Este vehículo contaba con detalles distintivos, como ensanches en los pasos de rueda traseros, un doble alerón trasero y un lujoso interior con asientos Recaro tapizados en terciopelo y un volante Momo firmado por Porsche Design.
No era el típico modelo que se podía encontrar en alguna concesionaria de la marca española, sino que estuvo modificado para cumplir con los estándares de lujo y rendimiento de la alteza. Así fue como terminaron construyendo una verdadera pieza histórica para una marca de gama media.
¿Qué sucedió con el primer coche del rey de España?
A pesar de su distinción, el SEAT Ibiza SXi pasó por varias manos después de que el rey lo utilizara en su juventud. Durante 16 años estuvo inactivo hasta que, en 2015, SEAT Históricos lo restauró y sorprendió al monarca con su reaparición durante una visita a la fábrica de Martorell. Esta restauración devolvió al coche su esplendor original y lo convirtió en una pieza de colección única, especialmente ahora que el modelo celebra su 40 aniversario en 2024.
La historia del primer coche de Felipe VI resalta la importancia de este vehículo tanto en su vida personal como en el legado de esta empresa como fabricante español. Aunque hoy en día pueda conducir automóviles de lujo más exclusivos, como corresponde a su posición, el Ibiza SXi siempre ocupará un lugar especial en su memoria como el vehículo que lo inició en el mundo del automovilismo.
