No son las noticias que tenemos nosotros en relación a la disponibilidad de esos elementos. Vamos por partes. El control de tracción avanzado XDS, que simula la acción de un diferencial autoblocante, ya no se monta en función de la potencia, sino del acabado. Es de serie en los acabados Style y FR, es decir, desde los 105 caballos en adelante.
Luego hay que diferenciar el sistema Seat Drive Profile del chasis activo. El primero te permite configurar las características de la dirección asistida, del pedal del acelerador, del cambio DSG, la luz ambiente de los paneles de las puertas y hasta el sonido del motor en algunos propulsores y es elemento de serie con el acabado FR, por lo tanto está disponible con los TDI tanto de 150 como de 184 caballos.
Por último, el control de chasis adaptativo permite regular el tarado de los amortiguadores y es un opcional, pero tampoco obliga a elegir la variante diésel más potente. Cuesta 656 euros en la carta de opciones y sólo se vincula al acabado FR, por lo tanto también está disponible con el 2.0 TDI de 150 caballos.
En resumen, el propulsor que quieres monta de serie el diferencial electrónico XDS y si eliges el acabado FR contarás con el Seat Drive Profile y deberás pagar aparte por el chasis activo.