No es la primera vez que recibimos una consulta de este tipo referente a este modelo en cuestión, pero antes de nada tenemos que decir que un vehículo no es eterno. Es cierto que el grado de satisfacción de los propietarios de la misma generación del Honda Civic que tú tienes es muy alto, pero también es lógico que con 18 años de antigüedad le salga 'alguna cosilla'. No nos dices los kilómetros que tiene ni el uso que le has dado, pero tenemos constancia que los 'silent-blocs' (casquillos de goma elásticos) situados en la suspensión trasera de ese modelo son uno de sus puntos 'conflictivos' porque se deteriora. Has tenido suerte que el problema haya surgido con tantos años porque, como te comentamos, suele ser una de las escasas averías que nos consta de ese modelo.

El problema no es la pieza en sí, porque como bien dices es perfectamente asumible. El motivo de que se dispare la factura final, como suponemos que te habrán informado en el taller, es que para colocarla hay que desmontar completamente toda la suspensión trasera del lado afectado, una acción muy laboriosa que requiere gran parte de mano de obra. Esa es la razón de que se incremente el precio, pero no queda otra alternativa si quieres pasar finalmente la ITV y poder seguir circulando con tu Honda Civic…