El paso de los años no perdona, por lo tanto, tu actual vehículo, el Volkswagen Golf GTI de 125 CV de antaño, era un 'pepino' en su época y ya casi un clásico ahora. Por eso nada tiene que ver con los dos modelos que tienes en mente para tu próxima adquisión, ni por consumos, ni por confort y menos aún en aspectos como la seguridad y la tecnología.

Nos llama la atención que dos modelos de corte tan diferente como el VW Golf 1.0 TSI 110 CV DSG (no son 115 como afirmas) y el Seat León 1.4 TSI 150 CV DSG tengan precios similares en Canarias. Dicho esto, los dos modelos son muy parecidos porque comparten plataforma y gran parte de su genética dentro del Grupo Volkswagen. Si la mayor parte de tus 15.000 kilómetros los realizas por autovía, lo cierto es que las diferencias en consumo no serán acusadas, y en todo caso mucho más atractivas que las de tu vehículo actual.

El Golf juega la baza de un motor con tres cilindros para resultar más eficiente, y lo consigue siempre y cuando no te animes demasiado con el acelerador. En conducción eficiente será un mechero, pero si vas con prisa este tipo de motores presentan una personalidad bipolar y su escasa cilindrada dispara vertiginosamente el consumo si forzamos. Y el sonido y la rumorosidad son más evidentes por su naturaleza tricilíndrica, pero no resultan molestos.

Por su parte, el León 1.4 TSI presenta la sofisticada tecnología ACT, capaz de desconectar dos de los cuatro cilindros siempre que la carga del motor y las condiciones de conducción lo permitan. La conexión o desconexión se produce de una manera tan suave que pasa desapercibida para el conductor. De esta manera se consigue un ahorro de combustible muy considerable. De hecho y a pesar de presumir de 150 CV (40 más que el Golf) el consumo homologado apenas es 0,2 litros superior.

Comentarte que el León también cuenta con motorizaciones 1.2 TSI 110 CV y 1.4 TSI 125 CV, pero suponemos que no las contemplas porque no se pueden asociar a la transmisión automática DSG. El modelo alemán 'viste' más y se remata con algo más de esmero, pero el acabado FR del León resulta muy atractivo. Además dinámicamente resulta más ágil gracias a una puesta a punta más deportiva, con una suspensión más firme o el asistente de serie Seat Drive Profile, que permite elegir entre cinco programas de conducción diferentes. Si sólo te preocupa el consumo, el Golf será más indicado; pero el León te llenará más en el resto…