Aunque gran parte del éxito de los vehículos SUV se basa en 'robar' ventas a los familiares monovolumen, hay fabricantes que siguen apostando por estos últimos. Es el caso de Volkswagen, que incluso potencia su oferta como demuestra la reciente llegada del Golf Sportsvan, la actualización del Sharan y la irrupción de esta tercera entrega del Touran, un modelo del que se han matriculado casi dos millones de unidades en todo el mundo desde 2003.
El nuevo Touran, cuyas entregas empezarán en septiembre y del que ya pueden hacerse pedidos -los precios arrancan en 26.280 euros, pero la marca habla de 20.800 euros como punto de partida incluyendo todos los descuentos-, es un producto totalmente nuevo, pues incluso estrena plataforma, ya que comparte con Golf y Passat la ya famosa MQB, concebida para motores transversales y que ayuda a rebajar el peso. De hecho, parte de los 62 kilos ahorrados en este tercer Touran se explican por esa nueva base, lo que tiene especial mérito dado que las dimensiones han crecido: la longitud es 13 centímetros mayor que antes y la anchura aumenta 4,1 centímetros. La distancia entre ejes se estira 11,3 centímetros, lo que alarga 6,3 centímetros el habitáculo, dato decisivo cuando hay tres filas de asientos, que será la configuración de serie en España. La fila intermedia se compone de tres butacas, cada una desplazable longitudinalmente 20 centímetros y con respaldos que podemos reclinar en tres ángulos. Y en la tercera fila, a la que se accede bien gracias a la función Easy Entry, la ganancia de espacio es también notoria: 54 milímetros extra para las rodillas y 13 más de altura al techo, lo que permite acomodar mejor a adultos. Además, las dos filas traseras se benefician del Fold Flat, sistema que permite crear en segundos un suelo plano, que incluso podremos prolongar hasta el salpicadero si abatimos el asiento del acompañante delantero.
1.857 litros de maletero
El volumen del maletero también es estupendo: 1.857 litros si sólo necesitamos dos plazas o 633 cuando usamos las cinco plazas delanteras y plegamos las dos butacas posteriores independientes. Aunque si necesitamos las siete plazas, para el equipaje quedarán sólo 137 litros. En cualquier caso, y sin sobreprecio, el cliente también podrá pedir el Touran con sólo dos filas de asientos, y en ese caso el volumen es todavía mayor: 1.980 litros si necesitamos sólo dos plazas y 743 con las cinco butacas en uso.
También notamos progreso al prepararnos para conducir, pues vamos algo más arriba que antes -nos sentamos a 62,5 centímetros del asfalto, cuando en un Golf GTI lo hacemos a 49,6- y el volante queda más vertical. El entorno rebosa calidad y orden, hay infinidad de huecos donde colocar cosas y los acabados Advance y Sport incluyen mesitas plegables en los respaldos delanteros. En la base de la gama encontramos los niveles de equipamiento Edition y Business, que se vinculan exclusivamente a los motores de gasolina y diésel de 110 CV, que ya ofrecen un rendimiento bastante razonable ayudados por la citada rebaja de peso y por una aerodinámica optimizada: Cx de 0,296.
Con gastos muy bajos
Para los que busquen más dinamismo la oferta se completa con otras dos mecánicas TSI -1.4 de 150 CV y 1.8 de 180, ésta disponible unos meses después- y los 2.0 TDI: uno con 150 CV y otro con 190. Y el gasto en todos los casos es muy bajo, destacando los 4,2 l/100 km de media del 1.6 TDI con cambio DSG de siete marchas.
El trabajo se redondea con un buen compromiso entre confort y comportamiento, y con la llegada de innovadoras tecnologías a todos los capítulos: asistentes de seguridad, sistemas de sonido y navegación, conectividad a la última… E incluso un amplificador de voz que, mediante la combinación de un micrófono en la zona delantera y los altavoces posteriores, facilita las conversaciones.
