Llevamos dos semanas ya de intensos recorridos a lo largo y ancho de la geografía española con el único propósito de seguir sumando kilómetros. El Hyundai Tucson está respondiendo perfectamente ante cualquier tipo de situación, ya sea dentro de la carretera como fuera. Esta semana hemos visitado varias localidades con mucha historia como son El Escorial, Trujillo, Burgos, Mérida, Ayllón y Buitrago de Lozoya. En cada una de ellas, el Tucson ha destacado por algo en concreto que trataré de explicaros a continuación.
Una mecánica suave y silenciosa
Pasan los días con el Tucson y las buenas sensaciones del principio no hacen mas que crecer. El coche es muy fácil de manejar y la adaptación a él es un mero trámite que se realiza tan fácilmente como sentarte y colocar sus mandos y su asiento a tu medida. Una de las cosas que más me han sorprendido esta semana es su aceleración. Ésta es muy lineal y suave, aunque en momentos de máxima exigencia responde perfectamente.
Además, engranar marchas con el Tucson es como cortar mantequilla con un cuchillo. Una vez adaptado al juego embrague acelerador, las marchas suben perfectamente con unos recorridos adecuados si tenemos en cuenta que estamos ante una mecánica diésel, cuyo principal objetivo es optimizar el gasto de combustible. No obstante, en esa búsqueda por reducir consumos, la sexta marcha puede resultarnos algo larga, pero sin duda no es algo que nos deba molestar, puesto que si en algún momento necesitamos adelantar la quinta siempre va a estar ahí para disparar el Tucson en muy pocos metros. Y así lo pude comprobar subiendo por el puerto hasta el Escorial, en cuyas carreteras adelanté con solvencia y sin apuros a grandes camiones.
Pero las virtudes de esta mecánica 2.0 CRDi de 136 caballos no se quedan ahí. El motor nos sigue sorprendiendo con el paso de los kilómetros mostrando un funcionamiento muy silencioso. Solo en momentos de máxima exigencia en el que las revoluciones suben hasta las 4 mil quinientas es cuando más podemos escuchar su motor, pero hasta entonces y con una velocidad constante en carretera, el sonido que llega al interior es un leve ronroneo que bien podría parecer el de un gato doméstico.
Consumos muy ajustados
Otro punto destacable de este nuevo Hyundai Tucson son sus consumos. En el anterior artículo ya os contábamos que éstos son muy reducidos pero hasta ahora no os habíamos explicado bien el por qué. Pues bien, os despejaré las dudas. El consumo medio real durante los viajes de esta semana no han sobrepasado los 6,1 litros a los 100 Km. Sé que este dato queda muy lejos de los 4,8 litros a los 100 kilómetros que homologa su ficha técnica (ya sabemos que estos datos son orientativos) pero teniendo en cuenta el peso del vehículo (1.605 kilos) y su cubicaje, nos parece más que lógico y razonable.
El consumo puede variar mucho dependiendo de la persona que conduzca y de las circunstancias de la carretera por la que se circula. En este sentido hemos pasado de calzadas estrechas y empinadas en pueblos como Trujillo a autovías bien asfaltadas y más bien llanas como la que lleva a Burgos. Su media pese a ello siempre ha sido de 6 litros y como os digo me parece muy meritorio. Cierto es que hemos clavado esa media gracias a la ayuda que supone el control de crucero que lleva de serie esta versión Tecno Sky Safe, pero hemos comprobado que sin él la media sube una o dos décimas más hasta situarse en los 6,2-6,3 litros a los 100 Km.
Donde sí se acerca al número de la ficha técnica en cuanto a consumos es en el de ciudad puesto que hemos marcado tanto por Burgos como por Madrid capital una media de 5,8 litros a los 100 Km (cuando homologa 5,6 litros a los 100 Km). Pese a deciros esto ahora, los consumos los iré comentando cada semana para saber la evolución que toman y si los podemos rebajar.
Un comportamiento ágil y dinámico
Si hablamos de manejo, el Tucson sigue siendo una caja de sorpresas. A su buen comportamiento en carretera tenemos que sumar una agilidad y un dinamismo inaudito en un SUV. Así, en un pueblo como Trujillo con calles estrechas y empinadas el Tucson se movía sin problemas, es más cuanto más complicado parecía el camino mejor se comportaba. Su tecnología tiene gran parte de culpa, puesto que en nuestra versión de pruebas disponemos de ayuda para el arranque en pendiente, reconocimiento de líneas de carretera, cámara posterior y sensores de aparcamiento. Si no nos creéis, Hyundai acaba de sacar un video que podéis disfrutar aquí en el que se ve su respuesta y su gran manejo.
Eso si, tenemos una pequeña queja sobre una de éstas tecnologías. Se trata del reconocimiento de líneas. Para mi gusto es algo intrusiva a la hora de corregirnos la trazada, y de hecho, nos hemos pegado algún susto al moverse el volante «solo» cuando íbamos perfectamente colocados. No obstante, esta opción se puede desactivar y quedarte con el típico sonido que te ayuda a no perder la concentración en el tráfico.
Esto es todo por hoy. La semana que viene seguiremos con la aventura tratando de superar el reto Tucson. Al terminar esta semana el vehículo cuenta con 14.126 Km en su odómetro, aunque en el personal llevamos 5.026 Km. ¿Cuántos haré? el tiempo lo dirá y sobre todo el Hyundai Tucson.
