Mazda quiere volver a contar con un crossover de gran tamaño en su oferta. En otras palabras, Mazda quiere volver a tener en su gama un nuevo Mazda CX-9, un modelo que hace justo un año se ponía a la venta en nuestro mercado como una edición especial con sólo 100 ejemplares que se vendían a un precio de 42.000 euros, una cantidad realmente ajustada para su tamaño, equipamiento y mecánica. Si bien, un consumo medio de 11,2 l/100 km echaba a mucho público para atrás.
Podría rondar los 5 metros de largo
Pues bien, Mazda trabaja en un sucesor para este Mazda CX-9 y lo veremos aún a modo de prototipo en el próximo Salón de Los Ángeles, que se celebra entre los días 20 y 29 de este mismo mes de noviembre. Mazda ha sido realmente rácana en su comunicado, pero este boceto adelanta un futuro crossover que podría rondar los cinco metros de longitud (el desaparecido Mazda CX-9 medía 5,10 metros de largo), aunque también podría ser más corto y quedar por encima del actual Mazda CX-5 con sus 4,56 metros de longitud, pues sino existiría un salto de tamaño considerable que habría que rellenar con un hipotético Mazda CX-7, el cual también se sumaría a los actuales Mazda CX-3 y Mazda CX-5.
Su diseño exterior se basa en las líneas KODO de los nuevos productos de la firma nipona y es muy probable que sea semejante al anterior prototipo mostrado en el Salón de Fráncfort, el Mazda Koeru Concept. Mazda se limita a confirmar que su mecánica contará con la tecnología SKYACTIV y es de suponer que para determinados mercados apostará por propulsores de gasolina, mientras que a Europa lo más sensato es pensar que llegará con sus eficientes propulsores diésel.