Ya te hemos hablado de los nuevos Porsche 911, los cuales fueron presentados en el pasado Salón de Fráncfort. Además de mostrar ligeros cambios en su estética, la principal novedad la encontramos en su propulsor, pues todos los 911 (hablamos de los 911 Carrera y 911 Carrera S) pasaron a contar con un nuevo motor 3.0 Bóxer dotado de doble sobrealimentación. Bienvenidos a la nueva era Turbo. Este apartado no es nuevo en nuestros protagonistas, pues los Porsche 911 Turbo y Porsche 911 Turbo S ya contaban con dos turbocompresores que elevan la potencia de su motor 3.8 de seis cilindros horizontales hasta los 520 y 560 CV respectivamente.
20 CV más que antes
Sin embargo la renovación de la gama también les ha pasado factura, incluso a nivel mecánico. Es por ello que ambos modelos suman un nuevo sistema de inyección, nuevas culatas y algún que otro retoque en la electrónica. En el caso de los Porsche 911 Turbo S también se han modificado los turbocompresores. Con estos cambios, la potencia en ambos se eleva en 20 caballos, por lo que los Porsche 911 Turbo pasan a generar 540 CV y 660 Nm de par máximo, cifra que se eleva puntualmente hasta los 710 Nm gracias a la función overboost.
Si nos centramos en los Porsche 911 Turbo S, decir que ahora generan una potencia de 580 CV y 700 Nm de par máximo, que se eleva hasta los 750 Nm gracias a la función overboost. Esta versión también puede subir hasta las 7.200 rpm, cuando antes su límite de giro era de 7.000 rpm. Ambas versiones siguen estando disponible con carrocería Coupé y con carrocería Convertible, y todos ellos están equipados con el cambio automático de doble embrague PDK de 7 velocidades y con un sistema de tracción permanente a las cuatro ruedas.
Los Porsche 911 Turbo son capaces de alcanzar una velocidad máxima de 320 km/h (5 km/h más que antes) y pueden acelerar de 0 a 100 km/h en tan sólo 3,0 segundos.
Por su parte, los Porsche 911 Turbo S cifran su velocidad máxima en los 330 km/h (12 km/h más que antes) y en sólo 2,9 segundos son capaces de acelerar de 0 a 100 km/h. Ambos homologan un consumo medio de 9,1 l/100 km y unas emisiones de 212 g/km de CO2, lo que supone un ahorro de 0,6 l/100 km respecto a las versiones anteriores. Los Cabriolet firman un gasto medio de 9,3 l/100 km.
Máximo equipamiento en los Turbo S
Además de coincidir en los consumos, utilizan la misma medida de gomas, con neumáticos 245/35 R20 en el eje delantero y 305/30 R20 en el eje trasero. Las versiones Turbo S añaden unas exclusivas llantas monotuerca y también cuentan con discos de freno carbocerámicos, que son una opción en los Porsche 911 Turbo por unos módicos 10.480 euros.
También aparecen nuevas opciones, como son el avisador de cambio involuntario de carril y también un sistema para poder elevar el eje delantero en 40 milímetros para no rozar el frente en bordillos o entradas a garaje por ejemplo. Y todos los cambios estéticos aplicados a los renovados 911 también se trasladan a estas deportivas y potentes versiones Turbo y Turbo S.
Ya en el habitáculo estrenan un volante de 360 milímetros de diámetro que está inspirado en el que utilizan los Porsche 918 Spyder, además de que suman la nueva pantalla táctil para el sistema PCM de navegación y entretenimiento.
Porsche anuncia que estos renovados 911 Turbo y 911 Turbo S estarán en los concesionarios a partir de la próxima primavera, pero ya hay precios y puedes ir reservando el tuyo. Es por ello que aquí tienes los precios:
– Porsche 911 Turbo: 200.822 euros.
– Porsche 911 Turbo Cabriolet: 215.755 euros.
– Porsche 911 Turbo S: 232.995 euros.
– Porsche 911 Turbo S Cabriolet: 247.928 euros.