No cabe la menor duda de que Porsche nos sorprendió a todos cuando presentaron sus renovados Porsche 911, los cuales han abierto una nueva era con la sobrealimentación, ya que a partir de ahora los 911 Carrera y 911 Carrera S pasan a tener propulsores equipados con turbo. Esta tecnología, la firma de Stuttgart la va a trasladar a los futuros Porsche Boxster y Porsche Cayman, que verán como desaparecen sus actuales motores de seis cilindros bóxer atmosféricos.
Nuevos cuatro cilindros turbo
En su lugar aparecerá un nuevo propulsor que presenta el código interno «9A2B4T», que mantiene su arquitectura de cilindros horizontales, pero que pierde dos cilindros para quedarse con cuatro. Las versiones de «acceso» presentarán una cilindrada de dos litros y añaden un turbo convencional. Serán capaces de desarrollar una potencia de 300 CV y un par máximo de 350 Nm (ahora las versiones de acceso tienen 265 CV y 280 Nm), con una zona roja situada en las 7.400 rpm. Se habla de que serán capaces de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos (un Boxster ahora necesita 5,8 segundos con cambio manual), mientras que su consumo medio se verá reducido en un litro (el actual anuncia 8,4 l/100 km de media), pues entre otras cosas siguen apostando por equipar el Start-Stop.
Aquellos que se decanten por un Boxster S o un Cayman S se encontrarán con una variante de este motor turbo, pero cuya cilindrada escala hasta los 2.5 litros. También el turbocompresor pasa a ser de geometría variable, al igual que sucede en los exclsuvisos Porsche 911 Turbo y 911 Turbo S. Gracias a todo ello se permitirán el lujo de ofrecer una potencia de 360 CV y un par máximo de 400 Nm (ahora un Boxster S se conforma con 315 CV y 360 Nm). Estas versiones serán capaces de acelerar de 0 a 100 km/h en menos de cinco segundos.
Dos tipos de cambio y más ligereza
De serie se combinarán con una caja de cambios manual de 6 velocidades, pero como opción se seguirá manteniendo la transmisión automática de doble embrague PDK de 7 relaciones.
Además de ser más potentes, estos nuevos propulsores turbo son más compactos y también han conseguido reducir su peso, por lo que los nuevos Boxster y Cayman serán aún más eficaces y divertidos.
Por cierto, decir que ambos modelos de Porsche adquieren una nueva denominación, ya que delante de sus nombres, ahora habrá que colocarles el prefijo 718, un giño al pasado, ya que hace mención a los deportivos de competición de finales de la década de los 50. Ahora se llamarán Porsche 718 Boxster y Porsche 718 Cayman.