En los últimos meses parece ser que ha repuntado la expectación de los coleccionistas por modelos como el Ferrari Testarossa, un deportivo cuya producción se inició en el año 1984 y del que se fabricaron 7.177 ejemplares repartidos por todas partes del mundo.
Uno de los detalles que hará que su precio se vaya incrementando con el paso del tiempo es que el Ferrari Testarossa es el último cavallino rampante con un motor de 12 cilindros posicionado de forma central, antes de que los de Maranello decidieran transplantarlo bajo el capó delantero. Eso sí, esto no sucede en sus modelos más carismáticos como pueden ser los Ferrari F50, Ferrari Enzo y Ferrari LaFerrari, pero sus precios a dia de hoy son desorbitados y parece que seguirán siendo extremadamente elevados y al alcance de unos pocos privilegiados.
El Ferrari Testarossa contaba con un motor de doce cilindros pero bóxer y tenía 390 CV de potencia.
En 21 años recorrió sólo 1.000 km
Este ejemplar que sale a subasta en Arizona por parte de RM Sotheby fue un encargo de Luigi Della Grotta, el hombre que convenció a «Il Comendatore», nada menos que a Enzo Ferrari, de que vendiera sus deportivos en Canadá. Se fabricó en 1991 (es uno de los últimos Testarossa, pues en ese año finaliza su fabricación en Maranello) y fue su vehículo personal. Sólo lo utilizó en actos del Club Ferrari Canadá y poco más, pues el coche se vendió a su muerte en 2012 con sólo 1.000 kilómetros.
En ese momento paso a manos de un nuevo propietario, quien a pesar de los kilómetros recorridos (los coches se estropean más parados que cuando se usan), decidió llevarlo al concesionario Mónaco Prestige para un importante servicio de mantenimiento. En él se sustituyeron aceite, filtros, batería…
Su segundo propietario lo ha estado utilizando mucho más que Luigi Della Grotta, tanto que ahora este Ferrari Testarossa muestra un total de 4.900 kilómetros (también son bastantes más que los de este Ferrari Testarossa que se vendió en Montreal). Ahora bien, el pasado mes de marzo de 2015 fue enviado de nuevo a un taller especializado para reemplazar elementos como los frenos, amortiguadores, del mismo modo que su motor bóxer fue desmontado para susituirle todas las correas, retenes, juntas de las válvulas…
No cabe duda de que se encuentra en perfectas condiciones y que además tiene toda la documentación original, el juego de herramientas y también todas las facturas de sus revisiones. Es por todo ello por lo que esperan que este Ferrari Testarossa alcance un precio de venta de hasta 250.000 euros.