En el mes de noviembre de 2004 sale de la factoría de Maranello este exclusivo Ferrari Enzo hacia el concesionario Forza S.p.A de Londres. El encargo corría por cuenta del Príncipe Akim, miembro de la familia real de Medio Oriente afincado en Inglaterra.
Pintado en un color único
Originalmente, este Cavallino Rampante estaba pintado en un llamativo color denominado Matt Titanio Extra Campionario, de forma que era el único de los 399 Enzo fabricados con este tono tan inusual. También presumía de ofrecer un interior tapizado en Piel Cuoio (4609), que contrastaba a la perfección con su exterior.
El Príncipe Akim lo tuvo en su poder hasta el año 2008, cuando lo vende a su segundo propietario, un magnate de la minería en Asia. Lo tiene en su poder nada menos que seis años y durante todo este tiempo decide cambiarlo de color. Apuesta por un exclusivo Blu Tour de France para revestir la carrocería de su Ferrari Enzo, fabricada en fibra de carbono y kevlar. El color es bastante acertado y le sigue aportando exclusividad, pues en el mundo no hay otro como él.
Prácticamente a estrenar
En 2014 vuelve a cambiar de manos y ahora de nuevo deciden deshacerse de esta maravilla que tan sólo ha rodado durante 8.838 kilómetros.
Semejante máquina cuenta con la certificación Ferrari Classiche, un historial completo de mantenimiento, los libros pertinentes, así como sus herramientas originales.
No está cifrado el precio orientativo por el que cambiará de dueño, pero todo apunta a que se venderá por unos dos millones de euros.