Hasta hace unos meses esta marca era casi totalmente desconocida para algunos aficionados, pero para otros fieles seguidores de la Indicar, era ya una más que conocida construcotora de chasis para competición. Sin ir más lejos ellos fueron los que pusieron el chasis al bólido de Fernando Alonso en su experiencia norteamericana en las 500 Millas de Indianápolis.
Ahora se han atrevido a sacar un vehículo para poder utilizar en la calle y nosotros lo hemos cazado. Las fotos fueron tomadas en Alemania y ponen de manifiesto lo avanzado del proyecto. No obstante, el vehículo de pruebas mantiene el camuflaje que ya hemos visto en tantos otros modelos.
Le plantará cara al KTM X-Bow
El vehículo de pruebas nos permite hacernos una idea bastante aproximada de cómo será la versión de producción. De esta forma, podemos aventurar que el Dallara matriculable dará prioridad a la funcionalidad frente a la estética, tal y como demuestran los delgados pilares y el techo de tipo targa que utiliza, algo que asegurará un buen campo de visión al conductor. Las puertas también llaman mucho la atención, pues parece que utilizará un sistema parecido a las puertas de «alas de gaviota» que ya puso de moda en su época el Mercedes 300 SL Gullwing.
No obstante, la zaga es la parte de la carrocería que más llama la atención. Primero con la utilización de unos estrechos pilotos traseros de diseño elegante y segundo por el ancho difusor y el sistema de escape doble a la altura de la matrícula. Asimismo, el alerón trasero fijo, de increíbles proporciones, nos recuerda, por momentos, al de un Porsche 911 GT3 salvando, eso sí, las distancias.
De lo que no tenemos ninguna duda es que el nuevo Dallara se convertirá en una seria alternativa al KTM X-Bow cuando llegue al mercado puesto que el año pasado, Gian Paolo Dallara confirmó que el coche debería tener un peso aproximado de 800 kilos. Si a esa cifra le sumamos una mecánica de origen Ford, concretamente la del Focus RS, convenientemente actualizada para desarrollar una potencia de 400 CV, las prestaciones alcanzarán una buena nota. Todo, completado con una caja de cambios manual, de 6 velocidades, y un sistema de propulsión trasera, para hacer las delicias de cualquier buen aficionado al motor.
Dallara solo fabricará unas 600 unidades a un ritmo de 120 ejemplares al año. Su precio por el momento no ha sido revelado, pero debemos esperar un valor que rondará entre los 60.000 y los 90.000 euros.