El Honda Jazz se somete a una intensa actualización, en su ciclo medio de vida, que salpica tanto a su estética como a su mecánica, ya que por primera vez incorpora un propulsor 1.5 i-VTEC que eroga 130 caballos de potencia. Esta mecánica se asocia exclusivamente al nuevo acabado Dynamic, el más completo de la gama.
Basta observar con algo de atención para comprobar la nueva personalidad de este modelo. El frontal se sitúa en la línea corporativa de los últimos lanzamientos de la marca japonesa, con nuevo diseño de los faros, una parrilla en forma de ala y un paragolpes que ofrece unas formas más agresivas.
Imagen más deportiva
Estos rasgos son más acentuados si cabe con el acabado Dynamic, ya que cuenta con un bifurcador frontal más bajo y un difusor más llamativo en el paragolpes trasero. Tanto en la parte delantera como en la trasera presenta una línea horizontal en rojo que acentúa su imagen más deportiva, además de ofrecer faros delanteros de led, antinieblas, faldones laterales, un alerón en el portón trasero y llantas de aleación 185 /55 R16 rematadas en color negro brillante.
Como es lógico no hay cambios en cuanto a habitabilidad o calidad se refiere con el Honda Jazz que conocemos hasta ahora. Este modelo es uno de los más amplios, versátiles y modulables que podemos encontrar en su segmento. También aquí el acabado Dynamic se desmarca con un estampado más exclusivo con rayas, el revestimiento en cuero del volante y la palanca del cambio o unas atractivas costuras en color naranja.
La otra gran novedad se ubica bajo el capó. Descartado en este segmento el diésel, hasta ahora el Jazz ofrecía un propulsor 1.3 i-VTEC de 102 CV de potencia, mecánica que se combinará desde este momento con el nuevo 1.5 i-VTEC de 130 CV, propulsor que hereda de otros vehículos de la marca, como el Civic o el HR-V. A sus 130 CV añade un par máximo de 15,8 mkg a 4.600 rpm, mientras que el consumo medio homologado se fija en 5,9 litros cada 100 kilómetros.
Mil euros más por la caja CVT
Disponible tanto con caja manual de seis relaciones como con la conocida transmisión automática CVT con variador contínuo (esta homologa 5,4 litros de consumo), el nuevo propulsor se muestra más contundente a la hora de recuperar y sus prestaciones son más brillantes, aunque curiosamente firma la misma velocidad punta que el 1.3 i-VTEC: 190 km/h. Eso sí, en el 0-100 km/h sólo necesita 8,7 segundos (en lugar de 11,2), si bien con la caja CVT el tiempo se incrementa hasta los 10,0 segundos.
Tuvimos ocasión de rodar con este nuevo propulsor, que hereda las tecnología de control electrónico variable de apertura y elevación de válvulas (VTEC) con un control de distribución variable (VTC). Su abanico ideal de funcionamiento oscila entre las 4.000 y las 6.500 rpm (el corte de inyección acaricia las 7.000 vueltas), si bien por debajo de estos números ya mueve con gran soltura un conjunto que pesa en vacío 1.104 kilos.
El cambio manual conquista por su precisión, tanto que nos atrevemos a decir que salvo que el Jazz se utilice de una manera muy intensa por ciudad, sería la caja a elegir. Y no lo decimos por los 1.000 euros que hay que pagar de sobreprecio por la transmisión CVT. Esta es ideal en tráfico urbano por su suavidad y refinamiento, pero pierde puntos cuanto más nos alejemos de la ciudad. En carretera o protagonizando una conducción más agresiva o dinámica, el variador continuo no puede evitar esa desagradable sensación de 'resbalamiento' que incrementa, además, la sonoridad de una manera evidente.
Otro de los aspectos donde brilla el nuevo Jazz es en el apartado tecnológico. Toda la gama incorpora de serie una frenada de emergencia automática en ciudad, y desde el segundo escalón de acabado ya ofrece el Honda Sensing, que contempla un aviso de colisión frontal, sistema de reconocimiento de señales de tráfico, limitador inteligente de velocidad, alerta de cambio involuntario de carril y luces de carretera automáticas.
PRECIOS
1.3 i-VTEC Trend 16.800 euros
1.3 i-VTEC Comfort 17.800 euros
1.3 i-VTEC Elegance 19.950 euros
1.5 i-VTEC Dynamic 20.700 euros
