Para conmemorar el 50 aniversario de Mercedes-AMG, los chicos de Affalterbach pusieron toda la carne en el asador para desarrollar este impresionante Mercedes-AMG Project One, un verdadero Fórmula 1 que se puede conducir por carreteras abiertas.
Semejante criatura fue presentada en el Salón de Fráncfort el pasado mes de septiembre y desde entonces Mercedes-AMG sigue desarrollando este bólido, del que ahora hemos conocido nuevos detalles técnicos, los cuales han sido desvelados por el mandamás de AMG, Tobias Moers, a los chicos de Autocar.
No llegará a los 1.100 caballos
Desde el minuto uno se sabía que esta criatura estaría impulsada por el mismo corazón 1.6 V6 que utilizan los monoplazas de Mercedes-AMG en la Fórmula 1. Si bien, recibiría unos cuantos retoques para adaptarlo a un funcionamiento más civilizado. Semejante corazón se acompaña de otros cuatro motores eléctricos, por lo que este Project One es un vehículo híbrido, enchufable y capaz de recorrer hasta 25 kilómetros en modo eléctrico. Pero eso no es lo más llamativo, lo que verdaderamente sorprende es que esta máquina fuera capaz de generar 1.000 CV de potencia, que finalmente han decidido que no son suficientes, por lo que ahora sabemos que su potencia combinada será mayor, pero sin superar la barrera de los 1.100 CV. Todo cuenta.
Cuando fue desvelado en Fráncfort también se hablaba de un peso en vacío de unos 1.200 kilos, pero ha sido el propio Tobias Moers quien ha confirmado que finalmente su salvaje Project One se posicionará en la franja que va de los 1.300 a los 1.400 kilos, por lo que no va a ser tan ligero como al principio se pensaba. Y es que era un peso demasiado optimista si tenemos en cuenta que el nuevo McLaren Senna, fabricado por completo en carbono y sin el lastre que suponen motores eléctricos y baterías se queda en unos sorprendentes 1.198 kilos.
Ahora también se sabe que su radical aerodinámica le va a proporcionar una carga de unos 675 kilos, prácticamente la mitad de lo que pesa este Project One.
Moers volvió a recalcar el origen de su corazón sobrealimentado, el cual, debido a su complejidad mecánica y a su elevado régimen de funcionamiento (se habla de que llega a las 11.000 rpm) deberá ser reconstruido pieza a pieza cuando el Project One haya recorrido 50.000 kilómetros (algo que será bastante raro, porque muchos de sus propietarios lo tendrán como meras piezas de colección). Ese handicap, que sólo con escuchar da una idea de que no va a ser nada barato, no ha sido un problema para que AMG colocara por más de dos millones de euros cada uno de los 275 ejemplares que fabricará. Si sólo se harán 275 unidades, y eso que Moers aseguró que recibieron más de 1.100 solicitudes de 'clientes creíbles'.
