Era octubre de 2016 cuando el Skoda Octavia se actualizaba a todos los niveles. Sin embargo, y aunque esta berlina comparte con otros modelos del grupo la conocida plataforma modular MQB, la firma checa decidía no equipar a su Octavia con la instrumentación digital que utilizaban vehículos como los Volkswagen Golf (decir que el Seat León o el Audi A3 tampoco la utilizan ni la ofrecen como opción).
Opcional por 350 euros
En Skoda esta instrumentación digital que la conforma una pantalla TFT de 12,3 pulgadas es conocida con el nombre de Active Info Display y la estrenó el nuevo Skoda Karoq. Sin embargo, ahora en el configurador de su país de origen aparece como una opción para los Octavia, que tiene un precio de 8.900 Coronas Checas, el equivalente a unos 350 euros.
Es calcada a la que utiliza el Karoq, con cuatro configuraciones diferentes (Classic, Digital, Infoprofile y Reduced) y la podríamos ver en vivo en el próximo Salón de Ginebra. Y tampoco habría que descartar que llegase a los Skoda Superb o Skoda Kodiaq, que comparten plataforma y que actualmente mantienen sus clásicos relojes analógicos.