Mazda se ha convertido en el primer fabricante que obtiene los permisos para cruzar el lago Baikal, en Siberia. La superficie de este gigantesco lago, que acumula el 20% de las reservas de agua del planeta, es de más de 600 kilómetros de largo y casi 80 de ancho y está helada cinco meses al año.
El evento Mazda Epic Drive Siberia reunió sobre las aguas heladas del lago Baikal varias unidades del Mazda CX-5 completamente estándar (solo llevaban neumáticos adecuados) para probar la capacidad de la tracción inteligente AWD en una ruta de 72 kilómetros. Al volante, 65 especialistas de medios de toda Europa, que comprobaron de primera mano el comportamiento del vehículo a la vez que admiraban la belleza de un ecosistema único en el mundo.
Una película con el CX-5
El viaje sirvió para comprobar el comportamiento de este automóvil en condiciones extremas, pero además la marca se ha preocupado de que su aventura no afectara a un ecosistema único, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Así, al evento de conducción se ha unido la producción de una película protagonizada por Irina Lyasota, directora adjunta de la Reserva Natural de Baikalsky, en la que se ofrece un acercamiento a este espacio natural único.
El director Ed Bazelgette, especialista en documentales para la BBC, se encargo de rodar la película y elogió el comportamiento del Mazda CX-5 y su diseño: «La magia del lago Baikal creó un lienzo en blanco maravilloso que nos permitió producir impresionantes imágenes y funcionó a la perfección con el diseño de Mazda y la pintura Red Crystal Soul del CX-5«, explicó.
