Hacía muchísimo tiempo que realizando una conducción «off road» con un vehículo todoterreno no tenía la tentación constante de meterme en líos. Entendiendo lo de meterme en líos por elegir el tramo más complicado, la zona más peligrosa o ese imponente bache que habría evitado a toda costa conduciendo cualquier otro coche. Sin embargo a bordo del nuevo Ford Ranger Raptor no hay lio que valga, si es necesario, y si no también, conduces casi sin despeinarte por lo que se convertiría en un infierno para casi cualquier otro todoterreno sin las características de este Pick up que hereda imagen y muchos de los valores del Ford F-150 Raptor americano, cuya primera generación nació en noviembre de 2008.
Nos lo decía Leo Roeks, Director de la División Performance de Ford Europa, y padre de la criatura: «el Ford Ranger Raptor viene a ser como una moto de motocross, una moto de nieve y un todoterreno, todo en uno». Y para comprobarlo hemos tenido la oportunidad de conducir al límite el Ford Ranger Raptor en un entorno privilegiado como es el de las dunas y los kilómetros y kilómetros de playa de Essaouira, al oeste de Marrakech, en Marruecos. Y allí, con el coche tal y como viene de fábrica, sin protecciones especiales y sin ni siquiera bajar las presiones de las ruedas, como habría que haber hecho con cualquier otro todoterreno por muy eficaz que fuese, hemos disfrutado de un Pick up que parece no tener límites sea cual sea el escenario elegido o los obstáculos que se presenten.
Cuatro modos de conducción para fuera del asfalto
Pero comencemos antes por algunas cifras para ir haciendo boca y poner en situación al lector. La altura libre al suelo del Raptor europeo es de 283 mm (241 mm en el Mercedes AMG G 63, por poner un ejemplo), puede vadear pasos de agua de 850 mm, incluye seis modos de conducción de los que cuatro son específicos para fuera del asfalto, el recorrido de suspensión es un 30 por ciento superior al Ranger normal y los amortiguadores están firmados por FOX Racing para asegurar el mejor rendimiento sin sacrificar la comodidad. Además, Ford ha recurrido en el Ranger Raptor a un motor diésel biturbo de 213 caballos y 500 Nm de par máximo que también utilizarán a mediados de año los Ranger sin el apellido Raptor y que sustituye al 3.2 TDCi de 200 caballos que ahora utilizan los acabados Wildtrak . Este propulsor utiliza dos turbos de diferente tamaño. El pequeño es de geometría fija y trabaja a bajas revoluciones, mientras que el grande es de geometría variable y su misión es mejorar el rendimiento con una sobrealimentación adecuada a medio y alto régimen. El caso es que los 213 caballos cumplen su misión a la perfección y eso que no lo tenían tan fácil.
Porque el Raptor, que lógicamente lleva chasis de largueros y protecciones por doquier para incrementar su rigidez, pesa 2,5 toneladas en vacío; y por sí fuera poco, este magnífico propulsor tiene que mover ruedas todoterreno específicas, desarrolladas por BF Goodrich, con una medida 285/70 R17 y unos tacos que imponen. Sin embargo el Pick up más eficaz fuera del asfalto que existe ahora mismo en Europa alcanza velocidades de crucero en autovía o autopista sin aparente esfuerzo y el consumo entra dentro de lo esperado en un «aparato» así. En concreto nosotros hemos medido entre 10 y 12 litros circulando hasta 120 km/h por todo tipo de carreteras y en el entorno de 17 l/100 km realizando una conducción por la arena abusando de marchas cortas y de una presión máxima casi constante sobre el acelerador. Y hablando de marchas, el Ranger Raptor recurre a un cambio automático de 10 marchas de convertidor de par con grandes levas en el volante y una facilidad sorprendente para adaptarse de forma automática a cada modo de conducción y dando lo mejor de sí en cada escenario.
El chasis del Raptor está desarrollado por Ford Performance y optimizado para la conducción todoterreno de alta velocidad. Utiliza aceros de alta resistencia y baja aleación para soportar todo lo que se presente. Y la suspensión de competición se ha diseñado de forma específica para superar los recorridos más radicales a alta velocidad sin perder ni el control ni la comodidad. Y es que los amortiguadores FOX cuentan con una válvula sensible a la posición para proporcionar mayor amortiguación en los extremos de su recorrido y mayor suavidad en la zona intermedia cuando se circula por carretera y menor bacheado. Además, el Raptor se olvida de las ballestas tan habituales en un Pick up y recurre, además de muelles y amortiguadores, a un nuevo sistema en espiral con un brazo de watt integrado que permite que el eje se mueva hacia arriba y hacia abajo pero con muy poco movimiento lateral. Todo ello evita el típico comportamiento saltarín del eje trasero en los Pick up cuando la gran bañera de carga va vacía. El cubrecarter del Raptor está fabricado en acero de alta resistencia de 2,3 mm de espesor, más de un 60 por ciento más gruesa que la placa estándar.
El sistema de gestión del terreno del Raptor nos permite seleccionar entre seis modos de conducción para ajustar la dinámica del coche a una amplia gama de terrenos y escenarios. Por ejemplo el modo «Normal», hace hincapié en el confort, el ahorro de combustible y la facilidad de conducción, es el que se activa por defecto al arrancar el coche. El modo «Deportivo» por su parte, es el adecuado para una conducción más viva en carretera con una respuesta más inmediata del cambio automático. Y ya situados fuera del asfalto, está disponible el modo «Hierba, Grava o Nieve», diseñado para asegurar la eficacia en superficies irregulares y resbaladizas. También se ofrece el modo de «Barro y Arena», con un ajuste específico del reparto de par y el frenado selectivo de las ruedas para una tracción adecuada en superficies profundas y deformables como arena y barro sueltos. El modo «Roca» está diseñado de forma específica para terrenos rocosos, siempre a baja velocidad donde es clave un control suave. Y por último el modo «Baja»- en honor a la mítica carrera de la Baja California- ajusta la respuesta para un rendimiento «off-road» de alta velocidad, justo el que necesitan los conductores para ir rápido por un camino destrozado o una playa repleta de surcos sin que el coche se descomponga afectando a la trayectoria y sin que al piloto la situación se le vaya de las manos.
Eficaz y muy poderoso
En nuestra emocionante toma de contacto con el Raptor europeo hemos probado todos los modos salvo el de hierba, grava o nieve y el resultado es fantástico por eficaz y sencillo. Es verdad que combinaciones hay muchas ya que un mando permite ir en tracción trasera, tracción total o tracción total con reductora, además de los 4 modos de conducción «off road», sin embargo al seleccionar dichos modos la misma pantalla aconseja el tipo de tracción que debes elegir y todo resulta mucho más fácil. En los modos probados hemos sido testigos de una eficacia aplastante, pero ha sido en el modo Baja y en un circuito preparado en una zona combinada de playa, piedras y pista rápida, donde más hemos disfrutado con un coche que pide marcha y que ni se inmuta ante los obstáculos.
Pero además de eficacia, el Ranger Raptor también transmite imagen de poder y fuerza con una estética agresiva que le va que ni pintado y que enamora no solo a los amantes de este tipo de vehículos Pick up, sino a todos los enamorados de un vehículo poderoso que te permite llegar a donde quieras, cuando quieras y por donde quieras. Dentro la fiesta continúa con un acabado de calidad y un diseño y equipamiento que roza el nivel de las versiones Vignale. Por ejemplo, los asientos reforzados están especialmente diseñados para la conducción todoterreno de alta velocidad con un cojín de doble firmeza y materiales de efecto gamuza para un mejor agarre.
El Raptor incluye también una versión mejorada del Control de Estabilidad Ford que incorpora la Función de Reducción de Balanceo; y Control de Estabilidad Electrónico; Control de Balanceo del Remolque; Asistente de Arranque en Pendiente; Control de Descenso en Pendiente; y Control de Carga Adaptativo. Además también lleva el sistema de comunicaciones y entretenimiento SYNC 3 de Ford, que permite a los conductores controlar el audio, la navegación y los teléfonos inteligentes conectados usando sencillos comandos de voz.
Los Ford Ranger Raptor que lleguen a España se fabrican en Sudáfrica, al igual que el resto de los Ranger europeos. El coche llegará a nuestro país en junio y ya hay 100 pedidos en firme con un precio final de 56.250 euros, un precio elevado pero justificado porque no hay otro Pick up igual en Europa.