La suspensión activa predictiva, que está disponible para las versiones TFSI del Audi A8, es un sistema que hace uso de actuadores electromecánicos que son capaces de ajustar la suspensión. Aumenta o reduce individualmente la suspensión en cada una de las ruedas, para poder controlar de forma activa la altura de la carrocería en cualquier situación.
Este nuevo sistema actúa de inmediato, en cinco décimas de segundo eleva o baja la carrocería hasta 85 mm desde la posición central.
Con motores eléctricos
Está formado por unos compactos motores eléctricos que se sitúan cerca de cada una de las ruedas del A8, que se mueven con el sistema eléctrico principal de 48 V y están controlados por la unidad electrónica de potencia. La transmisión por correa y la compacta transmisión armónica son capaces de aumentar el par del motor eléctrico casi 200 veces, hasta alcanzar 1.100 Nm, aplicándose a un tubo giratorio de acero.
La suspensión activa predictiva cuenta con un consumo medio de energía de 10 a 200 vatios. Dependiendo de la situación de conducción, este sistema puede alimentar la batería de 48 V con hasta 3kW.
Cuenta con un funcionamiento impresionante. Con el perfil «dynamic» es capaz de reaccionar como un deportivo. El A8 al tomar una curva rápida con 1 g de aceleración lateral, la inclinación de la carrocería es de apenas 2 grados, comparados con los más de 5 grados de la suspensión estándar.
El sistema trabaja mano a mano con el sistema de seguridad Audi pre sense 360, que forma parte del paquete de asistentes City. En un impacto lateral inminente a más de 25 km/h, la suspensión activa eleva la carrocería hasta 80mm en el lado del impacto.
