No es muy habitual encontrarse en el mercado de 'ocasión' con una joya como lo es el legendario Lamborghini Miura, un deportivo del que la firma de Sant'Agata Bolognese tan sólo fabricó 764 unidades. Sin embargo, esta unidad se ha puesto a la venta a través de la casa de subastas RM Sotheby's, a quien deberás preguntar por su precio exacto. Pero aunque no lo han desvelado, ya puedes intuir que no será barato y que podría superar con facilidad el millón y medio de euros. Seguro.
Como te había dicho, la firma italiana tan sólo construyó 764 unidades de su emblemático Miura. De todos ellos, apenas 275 ejemplares fueron de la primera serie, conocida como P400. Y este es uno de esos.
Es el ejemplar número 80
En concreto estás delante de la unidad con el chasis #3171, que fue construida en el mes de octubre de 1967, lo que significa que es el Lamborghini Miura número 80. Eso también le convierte en una pieza aún más deseada por los coleccionistas adinerados, porque sólo los 124 primeros Miura P400 contaban con un chasis en el que se utilizaba una tubería de acero de menor espesor a los siguienes, lo que le aportaba una mayor ligereza a este deportivo, que estaba impulsado por un corazón 4.0 V12 atmosférico y colocado en posición transversal, el cual presumía de ofrecer 350 CV de potencia.
Lamborghini entregó este impresionante Miura P400 a un cliente en Francia, que lo tiene en su poder una buena temporada hasta que en 1989 llega a Reino Unido. Su nuevo dueño decide someterlo a un trabajo de restauración en el que se vuelve a pintar y a tapizar su interior. También decide incorporar estas exclusivas llantas Campagnolo doradas.
La mecánica de este Miura se lleva al especialista Nicol Transmissions, quien pone a punto su corazón V12 con nuevos pistones, bielas, válvulas… Reconstruye los carburadores originales, el sistema de frenos y también su embrague Weber.
Es en 2012 cuando es vendido a un empresario español, que lo tiene en su poder hasta que en el año 2017 lo compra su actual propietario, quien ahora ha decidido desprenderse de esta joya, que puede ser tuyo siempre y cuando tu cuenta corriente te permita hacerlo.
