Reducir el impacto medioambiental y conseguir el menor nivel de emisiones es el objetivo que Toyota se ha marcado como socio oficial de movilidad para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020. Por eso, la marca destinará una flota de 3.700 vehículos que en un 90% serán electrificados.
La flota de vehículos que Toyota destinará al transporte de atletas y organizadores contará con unos 500 FCEV (Fuel Cell Electric Vehicles) y unos 850 BEV (Battery Electric Vehicles). Habrá eléctricos puros, vehículos de pila de combustible (como el Mirai, propulsado por hidrógeno), híbridos enchufables, el Prius PHV y vehículos desarrollados expresamente para el evento, como el APM, el e-Palette o el Concept-i.
Eficiente y seguros
De los 3.700 vehículos previstos, 2.700 se destinarán sobre todo al transporte entre sedes y se calcula que sus emisiones serán de media inferiores a los 80 g/km de CO2, lo que supone una reducción cercana a la mitad de la cantidad habitual en comparación con flotas de dimensiones similares compuestas principalmente por modelos propulsados por gasolina y diésel.
Además de eficientes, Toyota quiere que los transportes en Tokio 2020 sean seguros y, por eso, toda la flota irá equipada con tecnologías como el Toyota Safety Sense y Lexus Safety System +. Y casi todos los vehículos contarán con el sistema Smart Stop -SST- que frena en caso de pisar involuntariamente el pedal del acelerador.
