La fiebre por los SUV no parece detenerse y los fabricantes siguen apostando ferozmente por este segmento aunque en los últimos tiempos parece que dentro del mundo todocamino, la demanda está poniendo sus ojos en otro concepto, el SUV coupé.
Es por esto que Audi no ha querido dejar pasar la oportunidad de darle a los indecisos compradores que se debaten entre un eléctrico o un SUV, justamente un producto que haga que todas sus dudas se disipen: un SUV eléctrico que además, estrena carrocería coupé, por lo que se han cubierto en todas las ramas populares haciendo un coche que es tan eficiente y amplio como atractivo y dinámico: el e-tron Sportback.
Este vehículo de grandes dimensiones tiene como principal novedad su aspecto, con un techo casi plano que baja de manera muy marcada en su zaga y que se une de forma muy fluida con el portón y finalmente con el alerón posterior.
Y es que los chicos de la firma germana le han querido dar un toque más deportivo al e-tron (del que ya disponíamos en su carrocería normal de SUV) pero sin renunciar a ciertos detalles que nos hagan ver que estamos ante un modelo puramente eléctrico. La parrilla delantera cerrada en su mayor parte pintada en gris platino, los nuevos faros Matrix LED, el logotipo en la tapa de carga pintado en naranja de alto voltaje -también aplicable a las pinzas de freno- o las molduras de los pasos de rueda pintados en gris antracita mate, son algunos de los elementos que nos dejan claro que se trata de un vehículo moderno y propulsado en su totalidad por electricidad.
Más deportivo
Como todo Audi, el e-tron Sportback dispondrá de varios acabados entre los que se encuentra el S line, que añade unas llantas de 20 pulgadas y suspensión neumática deportiva, además de que los elementos decorativos S line del exterior se encuentran pintados en el color de la carrocería, incluidas las molduras de los pasos de rueda.
Pero si hay algo en lo que esta nueva versión se ve beneficiada respecto al SUV e-tron corriente es en su aerodinámica. Gracias a su nueva y fluida figura con una zaga mucho más refinada y suave, su coeficiente aerodinámico se reduce hasta 0,25, una cifra que mejora a su hermano. Gracias a este diseño la autonomía final también se ve beneficiada haciendo que podamos recorrer hasta un máximo de 446 km con un solo ciclo de carga (valor al que también contribuyen sus espejos virtuales, más aerodinámicos y finos).
Otra de las novedades que trae esta versión Sportback del e-tron es su nuevo sistema de iluminación Matrix LED digital, disponible opcionalmente. La luz que emiten sus diodos se divide en pequeños píxeles, capaces de iluminar la carretera con gran resolución. En su parte central hay un pequeño chip que contiene un millón de microespejos, cuya longitud es de apenas unas centésimas de milímetro y que puede inclinarse cada uno de forma individual hasta 5.000 veces por segundo.
Con toda esta tecnología parece claro que este vehículo está enfocado a la seguridad a bordo pero también esconde bajo este cascarón una potencia y unas sensaciones de conducción únicas. El e-tron Sportback 55 quattro equipa dos motores eléctricos que alcanzan los 360 CV de potencia haciendo que pase de 0 a 100 km/h en tan solo 6,6 segundos. Además, si el conductor lo necesita, puede cambiar el selector de D a S y activar así el modo ''Boost''. En ese instante el vehículo pasa a generar 408 caballos que se mantendrán durante ocho segundos, haciendo que sea un elemento verdaderamente útil a la hora de adelantar por ejemplo y haciendo que el tiempo de 0 a 100 se reduzca a tan solo 5,7 segundos.
Toda esta potencia se transmite al suelo por medio de la tracción total quattro, utilizando la mayor parte del tiempo sólo tracción trasera con el fin de una utilización más eficiente.
Y es que la eficiencia es uno de los temas más presentes en este vehículo en todos los aspectos, siendo el reparto de pesos por ejemplo, casi perfecto en un 50:50 entre el eje delantero y el trasero. Las baterías, colocadas en dos pisos distintos, tienen una capacidad conjunta de 95 kWh y esto contribuye a un centro de gravedad más bajo.
Además del e-tron Sportback 55 quattro, Audi incluirá en su lanzamiento una versión más ''light'', el Sportback 50 quattro, que genera 313 caballos y en el que se prescinde del piso superior de las baterías, ahorrando de esta forma 120 kg y reduciendo su autonomía hasta los 347 km.
La belleza está en el interior
Una vez hemos soltado todo el grueso de datos y especificaciones exteriores y prestacionales, toca la hora del interior, un aspecto de vital importancia ya que con la nueva carrocería coupé, tanto el espacio trasero como el volumen del maletero se ven afectados. Pero aquí el e-tron Sportback ha sabido manejar los espacios de forma adecuada haciendo que la altura del techo en las plazas traseras solo se vea reducida en 20 mm. En cuanto al espacio de los malteros (tanto el trasero como el delantero) nos encontramos con un volumen conjunto de 615 litros que si abatimos los asientos traseros incrementa hasta llegar a los 1.655.
Es por tanto un SUV que combina un espacio interior amplio con un aspecto externo más deportivo y coupé. Además, incorpora todos los elementos tecnológicos que cabría esperar de este modelo como pueda ser el Audi Virtual Cockpit, sus dos pantallas centrales táctiles de 12,1 y 8,6 pulgadas respectivamente desde las que podremos manejar la gran mayoría de opciones del vehículo o un sistema de sonido de alta fidelidad Bang & Olufsen opcional que, sumado a su increíble insonorización y su bajísimo ruido al rodar, nos permitirá disfrutar de una experiencia más digna de un home cinema que de un vehículo. También podremos contar, dentro del paquete Audi connect, con el servicio de voz Alexa de Amazon, que se encuentra completamente integrado en el sistema de infoentretenimiento del Audi e-tron Sportback.
Con todo esto parece que prestigiosa marca alemana quiere dotar al mercado de un vehículo completo que satisfaga la gran mayoría de las prioridades del cliente y que se espera que llegue al mercado europeo en la primavera de 2020 y que llegará con un precio de partida (en Alemania) de 71.350 euros.
