Y a ese cliente, más ambicioso e inflexible a la hora de invertir la segunda cantidad más importante después de la que requiere una casa, el nuevo Opel Corsa no le va a defraudar. Y no lo va a hacer porque del actual Corsa el nuevo tan sólo conserva el nombre. No podía ser de otra manera cuando hablamos del primer modelo desarrollado por Opel como parte integral del Groupe PSA. Con un presupuesto como es debido y el «savoir faire» del grupo francés, el Corsa, manteniendo su personalidad, ha podido aprovecharse de una nueva plataforma más ligera y flexible; de motores preparados para lo que se les viene encima a las marcas en cuanto a reducción de emisiones se refiere; de tecnologías de ayuda a la conducción que no tiene nada que envidiar a los ofrecidas por cualquier marca Premium; y hasta de una versión eléctrica que responde a las necesidades de una nueva época electrificada como la que, ahora sí, parece que quiere despuntar a partir del próximo mes de enero.
El nuevo Opel Corsa hace semanas que admite pedidos, que comunicó sus precios, y que se puede configurar en la web de la marca, por lo que después de los ríos de tinta que han corrido hablando de este modelo, pocas cosas vamos a descubrir ya a estas alturas. Salvo una. Y es que faltaba saber cómo iba, si la impecable imagen que transmite el exterior se transmite al interior y a su dinámica. Lo cierto es que el pasado mes de junio teníamos ocasión de probar varias unidades camufladas de Corsa que nos dejaron un excelente sabor de boca por aplomo, silencio de marcha, agrado de conducción y empuje de sus motores de gasolina. Pero el interior también estaba camuflado y los reglajes de suspensión, desarrollos de cambio y frenos no eran definitivos a la espera de que unos cuantos periodistas de todo el mundo diéramos nuestra opinión sobre estos asuntos clave.
Un aplomo sobresaliente
Ahora, con el coche definitivo vestido de calle y su puesta a punto final hemos podido conducirlo por carreteras croatas a veces bajo una intensa lluvia que no ha permitido conocer al cien por cien su dinámica. Pero nuestras primeras impresiones iban en la buena dirección. Magnifica insonorización, un reglaje específico de muelles y amortiguadores diferente al que puedan utilizar tanto el nuevo Peugeot 208 como el DS3 Crossback, con los que comparte la plataforma, y una ligereza del conjunto que se aprecia enseguida. El nuevo Corsa tiene un aplomo magnífico, se conduce con facilidad y sus reacciones a buen ritmo son sanas y previsibles, sobre todo comparado con el modelo al que sustituye.
Sin duda se disfruta conduciendo el nuevo Corsa con una conducción fluida y agradable que se sitúa ya al nivel del modelo de referencia, el Seat Ibiza. Y las versiones GS Line con el motor de 130 CV van un poco más firmes que los Peugeot 208 GT Line dotados del mismo motor, aunque sin llegar a incomodar a los ocupantes. Pero no hace falta elegir ese acabado más deportivo para que el Corsa se agarre bien al asfalto, aunque el tacto deportivo siempre lo agradecerán los más lanzados. Y como ya decíamos entonces, el motor de gasolina y tres cilindros con 130 caballos, siempre asociado a un cambio automático de 7 marchas, resulta el más brillante y deportivo con prestaciones de GTI y consumos, eso sí, muy sensibles al uso.
Es decir que si elegimos el modo ECO y realizamos una conducción normal la media de gasto cada 100 km es de entre 6 y 7 litros, mientras que sin miramientos y con una conducción alegre que no busque el consumo mínimo la cifra puede superar fácilmente los 8, y hablamos de un solo conductor sin apenas equipaje. Más equilibrado nos ha parecido el gasolina de 100 caballos con un rendimiento más que suficiente para el día a día y fuerza de sobra para mantener una medias razonables en un viaje por autovía o autopista. Y solo si se van a recorrer más de 25.000 kilómetros al año, dado el precio actual del gasóleo y que el Corsa diésel cuesta 2000 euros más que el de gasolina del mismo nivel de potencia, sería recomendable el Corsa diésel que está muy bien insonorizado y a velocidades mantenidas en sexta no parece que bajo el capo haya un motor movido por gasóleo. Eso sí, a partir de 3.500 rpm en aceleraciones el sonido de este motor 1.5 se hace mucho más patente. El Corsa diésel consume 1,4 l/100 km menos que su equivalente en gasolina, el 1.2 Turbo de 100 CV. En cualquier caso la marca asegura que el mix de ventas para este modelo será del 90 por ciento para los Corsa de gasolina y de tan solo un 10 por ciento para los diésel.
Gana centímetros en el interior
El nuevo Corsa es más largo y tiene más batalla pero es más bajo y menos ancho. El resultado es un interior que gana centímetros y un maletero que gana litros. En concreto Opel anuncia 309 litros con kit de reparación, 24 más que hasta ahora, y 40 litros menos en caso de llevar rueda de repuesto de emergencia. Sin embargo se ha reducido la altura de carga y el hueco tiene unas formas más regulares y es más profundo. Por su parte el volante tiene más juego de regulación en altura y el asiento va situado en una posición más elevada por lo que la postura de conducción es menos forzada que hasta ahora, y mucho menos que en el Peugeot 208 para según qué tallas, aunque molesta algo una arista del mueble central en la pierna derecha.
Opel ha trabajado mucho la diferenciación visual entre los niveles de acabado Elegance y GS Line. Por ejemplo, no comparten los paragolpes delanteros y traseros, el GS Line lleva asientos deportivos, pedales específicos y un alerón trasero más pronunciado, mientras que el Elegance se inclina más por un acabado más lujoso. Los precios del nuevo Opel Corsa hace tiempo que se conocen sin embargo conviene recordar que parten de los 10.900 euros para la versión de 75 CV en acabado Edition, sin tener que financiar gracias a una campaña especial en la que hay que entregar un coche usado y pagar al contado. El resto de modelos tienen un descuento de 2600 euros aunque esta cifra será mucho más ventajosa en caso de financiar la compra. Por lo que la versión que nosotros elegiríamos por equilibrio, equipamiento y agrado, el Corsa 1.2 T 100 CV con cambio automático EAT8, saldría sin financiar por alrededor de 19.000 euros.