Desde hace bastantes años, la empresa de ingeniería británica JRM Racing se encarga de desarrollar y de fabricar los salvajes Nissan GT-R GT3 empleados en competición y con el que consiguieron el Campeonato Mundial de Pilotos FIA GT1 allá por 2011.
No cabe la menor duda de que JRM Racing sabe un poco sobre este deportivo y ahora quieren llevar sus conocimientos en competición a las carreteras abiertas al tráfico. Es por ello que han comenzado a desarrollar este impresionante GT-R GT23, una versión realmente especial del deportivo nipón.
Potenciado hasta los 650 CV
Para comenzar, su 3.8 V6 Biturbo ha sido debidamente modificado para llegar a generar unos sorprendentes 650 CV de potencia, lo que son 50 más que los que proporciona un Nissan GT-R Nismo. Sin embargo esto no es lo que más llama la atención en esta máquina.
Y es que su transmisión de doble embrague y seis velocidades deja lugar a un cambio secuencial con el mismo número de relaciones, que ayuda a enviar toda esa potencia exclusivamente a las ruedas posteriores, de forma que su sistema de tracción total se elimina, ayudando a rebajar considerablemente su peso.
Tanto es así, que si le sumamos diferentes componentes de la carrocería en fibra de carbono, que se ha vaciado su interior y otras muchas cosas, este impresionante GT-R GT23 se queda en unos asombrosos 1.375 kilos. Eso son 425 kilos menos que un Nissan GT-R Nismo, y entonces hablamos de relaciones peso/potencia de 3,0 kg/CV en el Nismo y de 2,11 kg/CV en este GT23, que deberá ofrecer unas prestaciones fuera de toda duda.
Tan solo 23 ejemplares
JRM Racing también ha modificado sus suspensiones, que serán regulables en altura, dureza y compresión, al igual que contará con unos apéndices aerodinámicos fabricados para la ocasión, como son un alerón posterior de gran tamaño, faldones laterales, salidas de ventilación en el capó…
Como puedes imaginar, esta criatura no será nada barata, porque se habla de que su precio rondará las 500.000 libras, que vienen a ser como unos 600.000 euros al cambio actual. Además su singularidad estará bien pagada, porque solo se van a fabricar 23 unidades para todo el mundo.