El pasado 2019 nos trajo infinidad de nuevos vehículos. Entre ellos, no podía faltar la última generación del legendario Land Rover Defender, un todoterreno que ahora se ha aburgesado y reconvertido en SUV, que curiosamente muchos clientes e incondicionales no lo terminan de ver con buenos ojos. Es por ello que si sus cuentas corrientes son lo bastante saneadas, prefieren apostar por alguna de las criaturas ideadas por especialistas como East Coast Defender.
Su última creación se denomina Project Blackcomb y nace desde la base de un Land Rover Defender 90, el cual ha sido restaurado hasta el último de sus tornillos. Su carrocería apuesta por un tono Zermatt Silver, que contrasta con los detalles en Santorini Black. También luce unas llantas Sawtooth de 18 pulgadas con gomas BF Goodrich, una parrilla frontal creada para la ocasión, así como un paragolpes delantero personalizado, el cual incorpora las luces diurnas LED y un cabresatante.
Esconde un motor LS3 con 565 CV
El interior también se ha trabajado hasta el último milímetro y este Project Blackcomb luce unos asientos delanteros de tipo baquet tapizados en cuero de color negro adornado con un patrón de diamante creado con pespuntes en tono blanco. Esta misma combinación se traslada a sus asientos posteriores, que se pueden plegar para no restar espacio de carga. El techo se viste con tejido alcántara de color negro, se instala un volante Momo, relojes de aspecto clásico y un avanzado sistema de infoentretenimiento con un potente equipo de sonido. Y no hay que olvidar toques modernos como un sistema de apertura y arranque 'manos libres'.
La inmensa mayoría de las creaciones de East Coast Defender esconden bajo su capó delantero un corazón LS3 de General Motors. Y este Project Blackcomb no es una excepción, de forma que se mueve gracias a un poderoso 6.2 V8 al que además han colocado un compresor para generar la friolera de 565 CV de potencia, enviados a sus cuatro ruedas (mantiene un sistema de reductora y bloqueos para sus diferenciales) por medio de una transmisión automática de seis velocidades.
El nuevo Land Rover Defender no es que sea precisamente barato (en España parte de 61.300 euros), pero este Project Blackcomb tampoco lo regalan y aunque su precio no se ha dado a conocer, ya te digo que vayas preparando unos 200.000 euros si te quieres hacer con el.