comscore

Peugeot e-208. Quiere el poder

El nuevo 208 ha sido elegido 'Car of the Year 2020' por la prensa europea especializada, y en ese triunfo ha tenido que ver, sin duda, la presencia en la gama de este e-208, variante eléctrica que, con buen criterio, se ofrece con cuatro acabados: Active, Allure, GT Line y GT. Y el primero, el menos equipado, parte de 32.100 euros que ahora se quedan, con el descuento de la marca, en 29.600. ¿Mucho dinero o poco dinero? Si pensamos que un 208 PureTech 130 EAT8 de gasolina parte de 20.850 euros -con nivel Allure y rebaja incluida- la factura del eléctrico suena cara, pero a cambio tenemos un vehículo con etiqueta '0 Emisiones' y cuyos gastos de uso más bajos acaban cuadrando las cuentas. Peugeot, de hecho, pone un ejemplo: al cabo de 40.000 kilómetros y 49 meses de uso, el comprador de un 208 Active PureTech 100 EAT8 y el de un e-208 Active habrán pagado una media de 326 euros al mes por su coche.

Ya habíamos conducido el e-208 en dos ocasiones -en el circuito francés de Mortefontaine y durante la presentación del utilitario francés en Portugal-, pero ahora hemos tenido ocasión de probarlo también en España. Han sido solo dos días -55 horas exactamente-, y con una unidad matriculada en Francia de acabado GT -34.550 euros, incluyendo descuentos-, pero nos ha servido para seguir acumulando experiencias con una versión que ya copa la cuarta parte de los pedidos del 208 en nuestro continente.

Lo primero que hay que decir es que el e-208 se mueve por la ciudad discretamente, sin que nadie parezca caer en su condición eléctrica. Y es que para diferenciarle de un 208 PureTech o BlueHDi hay que fijarse en la ausencia de escape o en los logos repartidos por la carrocería: el 'e208' de la zaga o el emblema 'e' en cada pilar posterior. Aunque en un entorno silencioso los peatones sí se darán cuenta de que ese 208 es eléctrico… porque no hace ruido.

1 G3Uqg4F6o0EzL Motor16

Y esta es una primera virtud: el e-208 circula con una suavidad extrema y en completo silencio. Pulsamos el botón de arranque, ponemos la palanca en D… y a tirar. Y ojo, porque si aceleramos con ganas anda que se las pela, como demuestran esos 8,1 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h que le convierten en el 208 más rápido del momento -8,7 segundos necesita la versión de gasolina con 130 CV-. El responsable es un propulsor eléctrico de 100 kW -136 CV- que mueve sin problemas un conjunto que sí es pesado -1.530 kilos- pero no lo parece tanto en la práctica. Y no solo al acelerar, sino también al frenar o al abordar curvas.

¿Quiere eso decir que va como un 208 de motor 'normal'?

Pues no exactamente, porque en los virajes cerrados sí se aprecia que la masa sobre la que viajamos es más 'rotunda'. Por fuerza centrífuga pura. Pero como la batería de 50 kWh va distribuida a lo largo del suelo -forma una especie de 'H' para no restar amplitud, salvo un poco de hueco para los pies de los pasajeros traseros-, el centro de gravedad va más bajo; lo que se complementa con una suspensión más firme y, en el caso del e-208 GT, unas gomas 205/45 R17 -195/55 R16 para el Active-, de manera que la actitud en curva es sana, predecible y eficaz. Y si activamos el programa Sport -uno de los tres seleccionables con el botón Drive Mode, junto al Normal y el Eco-, las sensaciones de conducción son más dinámicas. Además, con cualquiera de ellos podemos llevar la palanca de cambio a la posición B para que haya retención al decelerar, lo que intensifica la recarga de la batería en marcha y facilita la conducción en la ciudad o en un atasco.

Y que la velocidad punta se haya limitado a 150 km/h no parece un problema por los límites legales de nuestras vías. Además, el consumo energético de los vehículos eléctricos crece de forma exponencial -más que en las mecánicas de combustión- si abusamos del pedal derecho. Y el e-208 no es una excepción.

De hecho, a los primeros consumos medidos en nuestro test express con este 208 eléctrico 'francés' no podemos calificarlos como bajos, pues en ciudad han sido 14,3 kWh/100 km y en autovía, a 120 km/h, 22,5 kWh/100 km. Y si avivamos un poco el ritmo de marcha, un recorrido que tenga un 50 por ciento de autovía, un 30 de ciudad y un 20 de carretera puede terminar por encima de los 21 kWh/100 km, cuando en esas condiciones un Hyundai Kona EV de 136 CV no llega a 17. De ahí que la autonomía real del e-208 pueda distar un poco, bastante o mucho de los 340 kilómetros homologados. Porque en ciudad sí rebasaremos en la práctica los 300 reales, pero en autovía pensar en 200 o 220 parece lo más acertado. En cuanto a la recarga, Peugeot habla de siete horas y media con una toma de 7,4 kW, 30 minutos en una de 100 kW o 16 horas en un enchufe doméstico, pero en la práctica esos tiempos se alargan claramente y, por ejemplo, en sendas tomas de 50 kW medimos velocidades de carga de 31,9 y 30,1 kWh por hora.

A trabajar con eso, porque un conjunto tan logrado merece que se cuide cada 'detalle'.

2 G3Uqg4F6o0EzL Motor16

Car of the Year 2020. El sexto de Peugeot

Segundo Peugeot en tres años y tercero en los últimos siete que se lleva este galardón. Diseño, tecnología y versión eléctrica han sido decisivos.

A sus cinco 'Car of the Year' precedentes -504 en 1969, 405 en 1988, 307 en 2002, 308 en 2014 y 3008 en 2017-, Peugeot suma el título logrado por el nuevo 208. Primer coche pequeño de la firma gala que lo logra, pues al mítico 205 le arrebató el triunfo el no menos legendario Fiat Uno en 1984 por 346 a 325 puntos. Y en esta ocasión, el modelo francés se ha impuesto por 39 puntos al Tesla Model 3, que junto al Porsche Taycan -otros 20 puntos más abajo- han configurado un podio histórico, con tres vehículos que disponen, al menos, de una mecánica eléctrica en su gama: Tesla y Porsche como únicas opciones de propulsión, Peugeot como complemento a su oferta de gasolina y diésel.

El 208 fue el más votado por 17 de los 58 jurados que votaron, pero Tesla convenció a uno más, 18, y Porsche y Renault, a 7 cada uno. En cuanto al Puma, 6 le dieron ganador.