El mercado sigue con una creciente tendencia SUV como formato favorito. Si a eso unimos un año 2020 en el que la electrificación crecerá más de un 50 por ciento en sus ventas en nuestro mercado, la cosa pinta bien para Kia.
Y lo hace porque lleva años aplicando con éxito esa combinación. En 2014 arrancó con el Soul eléctrico y dos años después llegó el Niro, modelo que presume de variantes híbrida HEV, 'plug-in' PHEV y eléctrica EV. Por último, el Sportage también se apuntó a la moda con una hibridación suave de 48V aplicada a su motores diésel.
Hemos probado parte de su gama SUV híbrida en una intensa jornada. Comenzamos con el Sportage. Su sistema híbrido ligero MHEV de 48V se asocia a las versiones diésel 1.6 CRDi con 115 y 136 CV -ya no se comercializa el bloque 2.0 CRDi-. Esta tecnología contempla una batería de iones de litio de 0,46 kWh, situada bajo el piso del maletero, y un motor-alternador que está conectado al ciguëñal por medio de una correa. Si es necesario aporta 10 kW (13,8 CV) de potencia eléctrica, pero nunca mueve el vehículo por sí mismo. También es capaz de regenerar energía en las deceleraciones y al frenar para cargar la batería.
Con esto se consigue, además de un ahorro de combustible que ronda el 7 por ciento, ser más suave al iniciar la marcha y resolutivo al acelerar, por ejemplo. No son apreciaciones radicales, pero sí se notan.
Damos fe durante el contacto realizado con la versión 1.6 CRDi de 136 CV, con caja DCT de siete relaciones y tracción delantera. Confortable, bien insonorizado y ágil dinámicamente hablando, es fácil registrar consumos por debajo de los 5,5 litros por carretera -homologa 5,8 de media-.
Más tarde nos pusimos al volante del Niro PHEV. Renovado recientemente con ligeros cambios estéticos y más equipamiento, mantiene tal cual su tecnología 'plug-in hybrid', que asocia un motor de gasolina 1.6 GDi de 105 CV a otro eléctrico de 60,5 CV, para una potencia combinada de 141 CV. A diferencia de algunos de sus rivales, el cambio automático es DCT con doble embrague y seis relaciones.
La batería de iones de 8,9 kWh le permite recorrer hasta 49 kilómetros de manera exclusivamente eléctrica, según la homologación WLTP. El Niro PHEV es tremendamente refinado en marcha. Presenta tres modos de conducción -eléctrico, híbrido y automático-, además de un programa Eco y otro Sport. En Eco las levas del cambio permiten gestionar la frenada regenerativa con tres intensidades diferentes, mientras que en Sport las levas sirven para gestionar las seis relaciones del cambio.
La ofensiva de Kia. 15 electrificados en 2020
Antes de que concluya el año Kia dispondrá de un total de 15 modelos electrificados. Dejará de comercializarse el Optima PHEV, pero la tecnología híbrida enchufable se aplicará sobre el XCeed, el Ceed Tourer y el nuevo Sorento. También aumentará la oferta híbrida autorrecargable, que se aplicará sobre el XCeed, el Ceed Tourer, el Ceed, el ProCeed y el Sorento.
Uno de los más esperados será el XCeed híbrido enchufable, disponible desde mayo. Monta la misma tecnología que el Niro PHEV, es decir, un motor de gasolina 1.6 GDi de 105 CV y otro eléctrico de 44,5 kW (60,5 CV) que ofrecen una potencia conjunta 141 CV. La batería de iones de litio de 8,9 kWh permitirá circular hasta 49 kilómetros de manera exclusivamente eléctrica.
Por su parte, la cuarta generación del Sorento llega con 'todo'. Estrena plataforma, es más espacioso y confortable, y contempla siete plazas en su interior. Ofrece un motor diésel de 2,2 litros y 202 CV asociado a una caja DCT de 8 relaciones, pero también dispone de una variante híbrida que combina un motor 1.6 T-GDi de gasolina y otro eléctrico de 44,2 kW (60 CV), rindiendo en conjunto 230 CV. La batería de iones de litio tiene una capacidad de 1,49 kWh, ligeramente menos que la del Niro híbrido. También llegará con una variante híbrida enchufable PHEV.