El primer PHEV de Citroën toma como base el C5 Aircross, un SUV de talla media -4,50 metros- que mantiene sus aptitudes familiares pese a perder 120 litros de maletero. Porque sus 460 litros para el equipaje se convierten en 600 si avanzamos la segunda fila, compuesta por tres butacas independientes. Y a esa versatilidad suma la eficiencia y las altas prestaciones ligadas a su mecánica de 225 CV y tracción delantera -la firma gala no ofrece la de 300 con tracción total-, fruto de asociar el 1.6 PureTech de 180 CV a un motor eléctrico de 109 CV que, ligado a la batería de 13,2 kWh, le puede impulsar a 135 km/h. El alcance eléctrico es de 55 kilómetros, hay tres modos de uso -Eléctrico, Híbrido y Sport- y una función e-Save permite conservar la carga de la batería.