Puede que este Clase X de Mercedes sea uno de los más elaborados, sino el que más, de los que hayas visto, y todo se lo debe a las mentes y manos expertas, que han trabajado sobre él en las instalaciones de Carlex Design.
Una camioneta de trabajo que no trabajará
En primer lugar, si empezamos por su zona exterior, lo que más llama la atención su carrocería pintada en dos tonos; blanco perlado y marrón. Este último parece ser el color principal y característico del coche, ya que encontramos el mismo por todas partes, sobre todo en su interior, al que ahora daremos paso. Pero antes echemos un vistazo a la caja de la pick-up, donde se ha sustituido el tradicional suelo de este tipo de vehículos por uno de madera a medida que hará de este el Clase X más refinado de su vecindario. Esto puede que no sea tan resistente a los arañazos y golpes como lo que trae de fábrica, pero también hay que decir que el dueño de este modelo en concreto no creemos que llegue a meter jamás nada pesado o a utilizar semejante coche para trabajo duro.
Ahora bien, dejando de lado el exterior, es en el interior donde más cambios vamos a encontrarnos respecto al modelo de serie. Para empezar el preparador ha empleado la madera como elemento principal en salpicadero y volante, mientras que elementos como la palanca de cambios, el freno de mano, los paneles de las puertas o la consola central han sido forrados en cuero. En otros lugares como pueda ser la zona superior del salpicadero, alguna zona del volante o las molduras superiores de las puertas se ha aplicado Alcantara, por lo que el interior presenta una calidad y un aspecto únicos.
