El pasado mes de junio debutaba el nuevo Opel Mokka, un SUV que mide 4,15 metros de longitud y que solo mantiene el nombre con su antecesor, pues es completamente nuevo y muestra de ello es que se sustenta sobre la conocida plataforma CMP del Grupo PSA.
Cuando por aquellos entonces fue desvelado, la firma alemana mostró exclusivamente su eficiente variante eléctrica, la cual no estará sola, porque este nuevo Mokka también estará disponible con propulsores térmicos. Si bien, a nivel estético será complicado diferenciarlos, porque a estos últimos, además del sonido de su mecánica les van a delatar detalles como la ausencia de la 'e' en su denominación o los terminales del sistema de escape. Si bien este último detalle podrían no quedar a la vista en las versiones normales del Mokka, pues las que tienes ante tus ojos equipan el deportivo acabado GS Line.
Un toque deportivo gracias al acabado GS Line
Estos también lucen unas llantas específicas de 18 pulgadas que combina los colores negro y rojo, además de que presentan otras partes de la carrocería en color rojo, la parrilla Vizor en negro brillante, mientras que el techo y el capó también en contraste con el color de la carrocería. Además, por dentro tienen unos asientos deportivos, molduras en color rojo que combinan con otras que simulan fibra de carbono, un tapizado específico, además de un techo vestido de tela de color negro.
Al nacer sobre la mencionada plataforma CMP estos Mokka heredan conocidos motores térmicos ya empleados en el Grupo PSA. Y es que en gasolina aparecerá el consagrado 1.2 PureTech de tres cilindros disponible con 100 y con 130 CV de potencia. Erogan 205 y 230 Nm de par motor respectivamente y vienen equipados con un cambio manual de 6 velocidades.
El más potente de los dos también podrá adquirirse con el automático EAT8, que en el interior carece de palanca selectora para engranar las marchas, pues en su lugar se ha colocado un minimalista selector en la consola central, además de que cuenta eso si, con levas en el volante.
En cuanto a prestaciones, Opel asegura que la versión de 100 CV puede acelerar de 0 a 100 km/h en 11,0 segundos y alcanzar los 182 km/h, mientras que la de 130 CV demanda 9,2 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h y puede llegar a los 202 km/h de velocidad punta.
Quienes valoren la eficiencia podrán poner sus ojos en el 1.5 Diésel, que proporciona 110 CV y 250 Nm. Este llegará solo con cambio manual de 6 velocidades y firmará un gasto medio de tan solo 3,8 l/100 km en ciclo NEDC.
Con lo último en tecnología
Al igual que el ya conocido Opel Mokka-e, estos equipados con mecánicas térmicas podrán contar con todo tipo de tecnologías, como control de velocidad activo con guiado por el carril, faros delanteros IntelliLux LED, sistema de visión trasera 180 grados, asistente de aparcamiento, cuadro de instrumentos digital de 12 pulgadas, pantalla central táctil de hasta 10 pulgadas…
Y curioso es que a pesar de ser 12,5 centímetros más corto que su antecesor, este nuevo Mokka ofrece más espacio en su interior y presume de tener un maletero con 350 litros de capacidad. Y esto también se mantiene en su versión eléctrica.