Green Hell o Infierno Verde es uno de los muchos apodos con que se conoce al mítico trazado alemán de Nürburgring. Y también es el nombre que la firma de los cuatro aros ha elegido para denominar a esta impresionante edición especial de su deportivo Audi R8, que también tiene un poco del todopoderoso Audi R8 LMS, una criatura con la que la casa alemana ha conseguido nada menos que cinco victorias totales en las legendarias 24 Horas de Nürburgring desde el año 2012.
Del R8 LMS #1 utilizado por Audi Sport Team Phoenix hereda este llamativo color verde oscuro, aunque bien es cierto que los clientes también podrán elegir su Green Hell en Ibis White, Daytona Grey o Mythos Black.
Independientemente del color elegido por su afortunado propietario, estos Green Hell lucen detalles en negro mate en el capó, el techo y los pilares delanteros. En negro mate también se viste el faldón delantero, los laterales y el difusor trasero por el que asoma su doble escape.
Todos con el 5.2 V10 FSI de 620 CV
En el exterior de esta edición especial también sobresalen las llantas de 20 pulgadas con detalles en color rojo, sin pasar por alto los emblemas 'Green Hell R8' que lucen sus paneles laterales y la banda superior de la luna delantera.
Una vez en su interior, Audi se decanta por equiparlo con unos impresionantes asientos tipo baquet tapizados en tejido Alcantara y cuero de color negro. Estos mismos materiales también están presentes en su salpicadero y en otras zonas de su habitáculo, adornados siempre con pespuntes en color verde y haciendo juego con sus alfombrillas, volante… Y claro está, tampoco desentonan sus molduras en carbono o su imponente equipamiento de serie, donde incluso no falta un equipo de sonido firmado por Bang & Olufsen y que cuenta con altavoces integrados en sus asientos.
La opción mecánica más potente de la gama es la que impulsa a esta edición especial, por lo que en posición central nos encontramos un sensacional motor atmosférico de los que ya quedan pocos. Hablamos de un 5.2 V10 FSI con 620 CV de potencia conectado a una transmisión automática S tronic de 7 velocidades y a un sistema de tracción a las cuatro ruedas quattro. Gracias a todo ello no es de extrañar que pueda acelerar de 0 a 100 km/h en 3,1 segundos y alcanzar los 331 km/h de velocidad punta.
Como buena edición especial también tiene sus contrapartidas, que en este caso es el hecho de que Audi solo fabricará 50 unidades para todo el mundo, con un precio de partida que en Alemania arranca en los 233.950 euros.
