Aunque a muchos jóvenes lectores el nombre de Lancia les pueda sonar a monovolúmenes y coches con un diseño… especial, esta no era para nada la tónica algunas décadas.
Lancia. Cochazo tras cochazo
Y es que en su historia Lancia ha fabricado coches espectaculares, coches ganadores, coches rápidos, coches imparables y coches campeones de rally… Es por esto que en los 80, el ADN de la competición que fluía por las venas de la firma italiana, les llevó a hacer, por ejemplo, este Delta S4 Stradale, un modelo tan popular y tan exquisito, que el precio de salida por el que se vende este ya lo dice todo…
Pese a que el parecido con el Delta corriente es evidente, poco tiene que ver uno con el otro, ya que el S4 Stradale ni siquiera estaba construido de la misma manera, empleándose en él un chasis tubular y situándo el motor situado en posición central para lograr una mejor distribución de pesos y así mejorar su manejo.
Dicho propulsor biturbo de cuatro cilindros se emparejaba a una caja de cambios manual y otorgaba al coche nada menos que 250 caballos, lo que hacía que pudiera pasar de 0 a 100 en unos 6 segundos. Estas cifras puede que no sorprendan en exceso hoy en día, pero para un coche compacto en los años 80, eran más que sorprendentes.
Pues bien, con todo esto dicho, hablemos más en profundidad de este ejemplar en cuestión. Se encuentra a la venta a través de Mobile, con una fecha de registro que data del año 1985 y con tan solo 12.000 km a sus espaldas. Durante los últimos 10 años se ha mantenido en un lugar seco y cobijado, además de que no ha sido utilizado ni una sola vez en una década. Según el anuncio, el coche funciona extremadamente bien y se ha cuidado con la más minuciosa atención a los detalles.
Sin embargo, como todo amante de los coches con unos pocos años sabrá, un Delta S4 Stradale no es para nada barato, de hecho, por este ejemplar en concreto se piden nada menos que 850.000 euros, una cifra que seguro que nadie imaginaba que iba a alcanzar cuando salió al mercado en los años 80.