Tres grandes empresas, Bosch, Shell y Volkswagen, unieron hace un tiempo sus fuerzas para desarrollar nuevos combustiblesmás eficientes que permitieran reducir significativamente las emisiones de CO2 que provocan los vehículos equipados con motores de combustión que utilizan combustibles fósiles como fuente de energía.
Bosch, como proveedor de tecnología; Shell, como productor de combustibles; y Volkswagen, como fabricante de automóviles; iniciaron hace unos años un proceso de investigación conjunta que facilitara lograr significativas reducciones en el volumen de emisiones de los motores de combustióngracias a nuevas mejoras introducidas tanto en la tecnología de los mismos, como en la producción de los automóviles y de los combustibles que estos utilizan.
El compromiso ha dado ya sus frutos. Hace unos meses presentaron el Blue Diesel R33, un gasóleo que propiciaba un ahorro también del 20 por ciento en sus emisiones. Y , ahora, el éxito se traslada igualmente a la gasolina, con la nueva Blue Gasoline, un combustible que cumple con el estandar EN 228/E10 (el mismo que actualmente ya cumplen las gasolinas que comercializa Shell en su red de Estaciones de Servicio), también reproduce el éxito con los mismos logros.
Además de la importante reducción de emisiones alcanzada, el nuevo combustible Blue Gasoline aporta más ventajas. Entre ellas, una que sin duda será muy apreciada por los modelos híbridos y, muy especialmente, por los híbridos enchufables, pues su resistencia a los almacenamientos prolongados es mayor y su punto de ebullición se alcanza a temperaturas superiores a las de la gasolina convencional.
Blue Gasoline, un 33 por ciento de energias renovables
El resultado es esta nueva Blue Gasoline, un nuevo carburante que permite reducir en un 20 por ciento las emisiones de CO2 que producen por kilómetro recorrido en los vehículos impulsados por motores que utilizan la gasolina como fuente de energía. Para conseguir esa reducción, la formulación del nuevo carburante conseguido procede en hasta un 33 por ciento de su composición de fuentes de energías renovables.
El importante porcentaje de reducción alcanzado en las emisiones de CO2 es aún más significativo si tenemos en cuenta que Blue Gasoline está especialmente «recomendado para su uso en los vehículos dotados con motorizaciones híbridas e híbridas enchufables«, dada su especial formulación, lo cual le convierte en «un componente adicional fundamental más en el camino para la reducción de las emisiones que producen los vehículos» , según comenta Sebastian Willmann, director de desarrollo de Motores de Combustión Interna en Volkswagen.
El nuevo combustible Blue Gasoline «supone un importante paso adelante en términos de sostenibilidad para los motores gasolina«, comenta Felix Balthasar, responsable de Combustibles Especiales en Shell, empresa que añade este nuevo combustible a su gama de combustibles renovables y bajos en carbono que hace unos meses también se vió reforzada con el lanzamiento del Blue Diesel, combustible fruto igualmente del acuerdo de colaboración de la empresa petrolera con Bosch y Volkswagen.
Un acuerdo que continuará evolucionando en los próximos tiempos pues como bien apunta Uwe Gackstatter, presidente de la división de Soluciones de Sistemas de Propulsión de Bosch, «en el camino hacia la movilidad respetuosa con el medio ambiente, debemos asegurarnos de no dejar ninguna oportunidad técnica sin aprovechar, comenzando por la electromovilidad y terminando por los combustibles renovables».
El nuevo combustible se va a comercializar antes de que finalice el presente año a través de las redes de estaciones de servicio que tanto Shell como Bosch tienen en Alemania, y, posteriormente irán llegando a los distintos mercados europeos en los que ambas marcas están presentes, el español entre ellos.
