Considerando que otros SUV de su talla, e incluso algo mayores, rondan los 30.000 euros si equipan motores de gasolina de unos 130 CV, los 38.426 de nuestro protagonista pueden asustar. Pero si en vez de elegir el lujoso Inscription probado optamos por el Momentum, la factura se desploma a 31.950 euros… Y ahí ya empezamos a entendernos, porque hablamos de una firma premium, de un modelo que fue elegido 'Car of the Year 2018' y de un producto que presume de calidad, tecnología e imagen. Y de más cosas, pues un XC40 es un vehículo amplio y funcional, y en solo 4,43 metros encierra un notable maletero de 460 litros -nos gusta el suelo de carga plegable en tres secciones para compartimentar el espacio- y un habitáculo apto para cinco adultos, pues todas las cotas son generosas y el túnel central sobresale poco -lástima que la banqueta trasera no sea más ancha, pues no llega hasta las puertas para habilitar sendas bandejitas en cada extremo-.
Elevada calidad
Además, la calidad general es estupenda por materiales y ajustes, los asientos son de primera y presume de ergonomía, aunque nos gustaría que hubiese que interactuar menos con la pantalla central vertical, que exige cierta práctica. En cuanto al equipamiento, el Inscription trae de todo, aunque si se nos va la mano con las opciones podemos disparar la factura final.
Y también convence el XC40 por agrado de conducción o seguridad en general. Dirección rápida -2,7 vueltas- y precisa, unos frenos solventes -52,9 metros para detenernos desde 120 km/h-, una suspensión suficientemente firme y con poco balanceo pese a tratarse de una versión poco prestacional… Y nos gusta el tarado de los asistentes de conducción, que se entrometen lo justo en la labor del que realmente manda.
Además, los 211 milímetros de altura libre al suelo dan muchas garantías si abandonamos el asfalto. Pero de cara a un uso 'off road' preferimos los 235/60 R17 del acabado Momentum a los 235/55 R18 que llevan Inscription y R-Design, y por supuesto a los excesivos 235/45 R20 de nuestra unidad -opción de 949 euros-.
Buenas prestaciones para 129 CV
Porque tanta goma en contacto con el suelo -contacto del bueno, pues los P Zero agarran bien- no ayuda a contener el consumo de una versión que no brilla especialmente en ese capítulo. Anuncia 7 litros exactos de media oficial y le hemos medido 8,4 l/100 km, siendo su escenario menos favorable la ciudad, donde se moverá entre 9 y 10 litros… siendo cuidadosos.
No obstante, si el uso será como segundo vehículo de la casa, con cortos kilometrajes diarios, esa 'sed' pasará a ser secundaria. Y en cambio pasará a ser relevante su suavidad de marcha y progresividad, pues este moderno 1.5 turboalimentado funciona como la seda, y cuesta creer que solo tenga tres cilindros: no vibra, no suena mal ni mucho… Y para la urbe y su entorno, o circulando a ritmos turísticos, cumple de sobra. Otra cosa es que lo carguemos bastante o que exijamos mucho a sus 129 CV, porque aceleraciones y recuperaciones son de versión básica. Buena, pero básica.
LA CLAVE
El XC40 ya no ofrece versiones diésel, pero al tiempo que su gama se electrifica -ya hay un eléctrico puro, dos híbridos enchufables y dos motores con hibridación suave-, recibe este moderno tricilíndrico de gasolina con 129 CV, perfecto como SUV de calidad a precio razonable o como segundo coche para hogares 'premium'.