Hace ya unos cuantos años que la firma de la estrella se animó a ofrecer a sus clientes un vehículo compacto como tal, pues fue en 2011 cuando se puso a la venta el Mercedes-Benz Clase A. En realidad este nombre lo lleva utilizando la casa alemana desde 1997, cuando lanzó al mercado el original Clase A, que en realidad era un diminuto vehículo (medía solo 3,60 metros de largo, que son 82 centímetros menos que el actual Clase A) con una silueta de típico monovolumen que como recordarás causó un gran revuelo en su lanzamiento por el famoso y televisado vuelco en la 'prueba del alce', que obligó a la casa alemana a equipar a todos sus Clase A con el por aquellos entonces, avanzado sistema ESP usado por los Clase S.
Subsanado aquel incidente cierto es que la primera generación de este funcional e ingenioso modelo causó furor, más aún las ediciones especiales que llegaron a ponerse a la venta. Una de ellas fue esta que ahora tienes ante tus ojos y que servía para celebrar las victorias del equipo McLaren Mercedes en Fórmula 1.
Solo hay 125 unidades
Bautizado con el nombre de Häkkinen Edition, se lanzó al mercado en el año 1999 sobre la base de un A 160. Pero junto a él también llegó el Coulthard Edition, otra edición especial en honor a su compañero en la escudería. Precisamente del monoplaza original este Clase A heredaba los colores exteriores, que casaban a la perfección con unas llantas AMG de 17 pulgadas, una doble salida de escape trasera o el nombre de cada uno de los pilotos, acompañado por la bandera de su país.
En el interior abunda el exclusivo cuero Designo en color rojo, además de que su equipamiento de serie contemplaba el aire acondicionado, elevalunas eléctricos, techo panorámico eléctrico, sistema de sonido Bose, asientos delanteros con calefacción, airbag delanteros y laterales, pedales de acero inoxidable, estribos personalizados, retrovisores eléctricos y plegables…
Sobre la base de un A 160
Aunque por aquellos entonces el mundo esperaba una edición especial más potente (de aquel Clase A llegó a existir la versión 210 Evolution con 140 CV) acorde a lo que se esperaba de una creación exclusiva inspirada en la Fórmula 1, la firma de la estrella apostó por crearlos sobre la base de un A 160, una versión que esconde un sencillo 1.6 de cuatro cilindros y atmosférico que genera 102 CV de potencia y 150 Nm de par motor. Todo ello se envía a las ruedas delanteras por medio de un cambio manual de 5 velocidades, el cual tiene un embrague pilotado. Todo ello da como resultado un utilitario que acelera de 0 a 100 km/h en 10,8 segundos y alcanza los 180 km/h de velocidad punta.
La compañía alemana tan solo fabricó 125 unidades de cada uno de estos exclusivos Clase A, y este en concreto fue entregado originalmente en Roma allá por 1999. La mayor parte de su vida ha estado en salas de exposición u oculto en garajes, de ahí su estado y el hecho de que tan solo tenga 215 kilómetros.
Ahora los expertos de Mechatronik lo han puesto a la venta a un precio prohibitivo, porque piden la friolera de 44.900 euros. Y eso son 3.000 euros más de lo que a día de hoy cuesta un Mercedes-Benz A 250 e a estrenar.