RaceChip ofrece todo tipo de mejoras electrónicas para que puedas potenciar prácticamente cualquier modelo del mercado. Y el Hyundai i30 no se escapa a su control. Ni tan siquiera la deportiva versión N.
Para los Performance que tienen un 2.0 T-GDI con 275 CV, RaceChip ofrece tres mejoras electrónicas para extraer algún que otro caballo adicional y son:
– S: 24 CV por 249 euros.
– RS: 31 CV por 299 euros.
– GTS: 38 CV por 599 euros.