El proyecto Audi Traffic Light se estrenó en la ciudad alemana de Ingolstadt y permite a los vehículos de la firma alemana comunicarse con los semáforos. Gracias a ello el conductor conoce de antemano su estado con unos 250 metros de antelación y así puede variar la velocidad para que cuando llegue al semáforo, este haya cambiado de posición y así no sea necesario tener que detener el vehículo por completo, mejorando la fluidez del tráfico y también rebajando las emisiones contaminantes (se estima una reducción del 15%).
Pues ahora este proyecto llega a la ciudad de Düsseldorf, donde unos 450 semáforos de los 600 existentes, cuentan con esta tecnología de comunicación.