Este bólido toma como punto de partida el deportivo Ford Mustang Shelby GT350, una criatura que esconde un corazón 5.2 V8 capaz de proporcionar 526 CV de potencia y 580 Nm de par motor, datos más que suficientes para ofrecer unas prestaciones sensacionales en este 'pony car'. Sin embargo muy lejos de las aspiraciones de Fathouse Performance, que ofrece un total de tres modificaciones diferentes para este bloque.