Mantener el coche limpio es fundamental para la seguridad vial… tanto que si no lo haces te puedes llevar una multa por pasarte de sucio. Por suerte existe el túnel de autolavado, que nos permite hacerlo con las mejores herramientas y solo tienes que elegir el programa deseado, esperando unos minutos hasta que el coche abandona las instalaciones completamente limpio.
¿Parece lo más cómodo, no? De hecho puede ser hasta relajante ver cómo tu coche pierde todo rastro de suciedad, queda como nuevo y pasa del enjabonado al aclarado en un santiamén sin esfuerzo alguno… Pero también esa placentera y despreocupada sensación puede transformarse en angustia, miedo y sufrimiento.
1Nadie va a mimar tu coche tanto como tú
La comodidad que conlleva este proceso, en algunos casos, no es tan buena para el propio vehículo. Muchas veces hemos oído a multitud de conductores que relatan con rabia cómo su coche ha sido dañado durante los minutos que dura el autolavado… y por cierto, encima, tienen que pagar los desperfectos de su propio bolsillo.
Nadie quiere pasar por un trago así de amargo con algo tan preciado para todos nosotros como es el coche. Si no te ha pasado, esperamos que tal situación no ocurra, pero si llega a producirse hay que preguntarse inevitablemente quién es responsable de los daños ocasionados en el vehículo tras su fatídico paso por un túnel de autolavado y, por supuesto, cuál es el procedimiento a seguir en busca de una compensación.