A nivel estadístico, 2020 y 2021 son dos años condicionados por factores muy particulares a causa de la pandemia. Confinamientos, restricciones, menos movilidad… Es inevitable que cuando hablamos de siniestralidad vial los datos se disparen este año, esa es una clara señal de que todo vuelve a la normalidad.
Durante el primer trimestre de año, los datos demuestran que en nuestras carreteras se produjeron hasta un 40 por ciento más de víctimas mortales en accidente de tráfico respecto a 2021. Pero lo más preocupante es compararlo con el primer año pre-pandémico, 2019. Las víctimas han crecido un 11 por ciento más. El mayor incremento se registró en autovías y autopistas, pero también las carreteras convencionales vieron subir las cifras de fallecidos.
1La DGT mantiene su cruzada contra la siniestralidad
Es evidente que con estos datos tan poco optimistas hay que hacer algo. La DGT no está de brazos cruzados, ni mucho menos. La vigilancia y el control en las carreteras crece ostensiblemente y, además, la nueva Ley de Tráfico contempla mayores sanciones en muchas infracciones y nuevos métodos de control de la velocidad y las distracciones, como los drones o las furgonetas camufladas de la DGT.
Por si fuera poco, la DGT emprende una nueva batalla, la de las redes sociales y la concienciación constante a los conductores. Y en este punto de recomendaciones y nuevas actuaciones que puedan contribuir a frenar la alta siniestralidad vial, han publicado una serie de consejos y advertencias para alertar de un tipo de adelantamiento muy peligroso en carretera y que está prohibido a pesar de que no exista señal que lo prohíba expresamente.