La duodécima generación del Toyota Corolla se renueva tres años después de su lanzamiento. Casi todos los cambios se concentran en el interior, que se digitaliza por completo e incorpora mucha más tecnología que antes. El restyling afecta a las tres carrocerías del compacto japonés.
La llegada del actual Toyota Corolla a la gama de la marca japonesa supuso un punto de inflexión. No solo desaparecía la denominación Auris para recuperar el legendario apellido Corolla en Europa. También permitió a Toyota ganar el terreno que había perdido en el segmento de los compactos con una propuesta que ha funcionado francamente bien en toda Europa.
Objetivo: volver a ser el compacto más vendido
Tanto es así que el Toyota Corolla fue el tercer coche más vendido en España en 2021 y el primero del segmento compacto, a mucha distancia del segundo, que fue el Citroën C4, en la 14 posición. La tecnología híbrida es una de las claves de su éxito, tanto en el conjunto de 122 CV como en el de 180 CV. Ambos son solventes y, sobre todo, muy frugales.
También convence por su diseño, por la habitabilidad interior, especialmente en la versión Touring Sports con carrocería familiar, y por su calidad de rodadura. Sin embargo, el Toyota Corolla tenía un punto débil desde que llegó a los concesionarios en 2019: el sistema multimedia estaba desfasado, de la misma forma que el cuadro de instrumentos.
Cambios sútiles en el exterior
Ahora Toyota lo ha resuelto con una actualización. Las modificaciones afectan al exterior y al interior, aunque por fuera son más bien sutiles. Además de ampliar la paleta de colores para la carrocería y el catálogo de llantas, renueva elementos menores, como la rejilla de la parrilla delantera y los marcos de los antiniebla.
En el caso de los acabados tope de gama del Toyota Corolla Touring Sports y el cinco puertas, los faros bi-LED adaptativos son nuevos. El GR Sport, además, cuenta con otros cambios menores, como nuevas llantas de aleación de 18 pulgadas, asientos con el logotipo de GR en los reposacabezas y el botón de arranque.
El Toyota Corolla se moderniza por dentro
Los cambios son más evidentes en el interior. Con esta renovación, el Toyota Corolla resuelve su principal hándicap sustituyendo el vetusto cuadro de mandos que tenía hasta ahora por uno completamente digital y personalizable con pantalla de 12,3 pulgadas.
La pantalla táctil central del Toyota Corolla también tiene un aspecto más moderno. Es más grande, de 10,5 pulgadas, y el interfaz del sistema de infoentretenimiento es más atractivo y fácil de manejar. También ofrece más conectividad, con Apple CarPlay y Android Auto sin cable. Además, el Toyota Corolla recibe más sistemas de ayuda a la conducción y actualizaciones Over-the-air (OTA).
Sigue apostando por la electrificación
Igual de importantes son los cambios a nivel técnico. En nuestro mercado el Toyota Corolla solo está a la venta con dos conjuntos híbridos. A partir de ahora, la gama seguirá formada por los mismos motores electrificados, pero ambos reciben mejoras para ofrecer más rendimiento y mejores consumos.
Por un lado, el Toyota Corolla de 1.8 litros, es decir, el de acceso a la gama, incrementa su potencia desde los 122 CV del modelo actual hasta 140 CV. Gracias a ello, acelera de 0 a 100 km/h en 9,2 segundos, mientras que el Corolla 1.8 anterior lo hacía en 10,9 segundos. Por su parte, el motor de 2.0 litros pasa de 180 a 196 CV. En este caso, es medio segundo más rápido a la hora de completar el 0 a 100 km/h y solo necesita 7,5 segundos.
El Toyota Corolla es más agradable al volante
Toyota también se ha esforzado en mejorar el tacto de conducción del Toyota Corolla. La firma japonesa asegura que su renovado compacto acelera de una forma más natural y se reduce la sensación de resbalamiento que produce el cambio de tipo CVT. Este último es el único disponible con ambas mecánicas, siempre con tracción delantera.
El renovado Toyota Corolla se pondrá a la venta en Europa en el primer cuatrimestre de 2023. Por ahora, no se han desvelado sus precios. Teniendo en cuenta la tendencia del mercado, será más caro que el actual, pero no debería haber una gran diferencia.
