Sin duda, el verano es una de las épocas del año más complicadas para el coche. En resumen, nos centraremos en un lugar concreto: la playa. Este es uno de los destinos preferidos para las vacaciones, gracias al disfrute que producen el mar y la arena a las personas. Sin embargo, si no tenemos cuidado, estos elementos pueden causar daños severos a nuestro vehículo.
A continuación, en el artículo te daremos algunos consejos para que no sufras dolores de cabeza en tus días libres.
1Mantente atento con la arena de la playa
En otras palabras, la playa es sinónimo de arena. Por ende, es uno de los principales enemigos del coche. Asimismo, es casi imposible que entre en el interior del vehículo, pero se puede reducir la cantidad con una buena limpieza de los ocupantes antes de subirse. Para evitar su acumulación podemos optar por accesorios como unas alfombrillas de repuesto solo para usar en verano.