El mercado de vehículos de segunda mano siempre ha sido una buena opción a la hora de comprar un coche. De hecho, actualmente el mercado de ocasión está «pegando» fuerte, mucho más que la compra en concesionario. Normalmente, para la transferencia de un vehículo entre particulares, se acude a una gestoría para que allí se encarguen de todos los papeleos a cambio de un desembolso económico. Sin embargo, es posible hacer estos trámites nosotros mismos porque no son demasiado complicados.
Para completar la transferencia de un coche o cualquier otro vehículo motorizado hay que completar trámites con dos instituciones distintas: Hacienda y la Dirección General de Tráfico. Cuentas con la ventaja de que, en algunas comunidades, el trámite con la primera se puede realizar telemáticamente si se dispone de certificado digital, así que solo tendrás que desplazarte en una ocasión para llevar a cabo el cambio de nombre del coche.
1Documentación necesaria para la transferencia del coche
¿Cuáles son los trámites necesarios para poder realizar nosotros mismos la transferencia de un coche o cualquier otro vehículo motorizado? Quizás de primeras te resulte un tema engorroso, pero es mucho más sencillo de lo que crees. En primer lugar, para cambiar de nombre un coche tenemos que asegurarnos de que tenemos todos los documentos que nos piden. Tanto del coche… ¡como del comprador y el vendedor! Son los siguientes:
- Contrato de compra-venta correctamente firmado por las dos personas. Original y copia.
- Ambas fotocopias de los DNI del vendedor y el comprador del vehículo.
- Documentación obligatoria del coche, consistente en la Tarjeta de ITV del vehículo con la ITV en regla y el Permiso de circulación.
- Último recibo que se tenga del impuesto de circulación pagado.
- Solicitud de transmisión de vehículos en la que figuren los datos del vehículo, los del comprador y los del vendedor.
Sigue acompañándonos en estas líneas para conocer los siguientes pasos.