España se mantiene a la cola de Europa en lo que respecta al desarrollo de la movilidad eléctrica y avanza lentamente en la consecución de los objetivos fijados para 2022 en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), según los datos del barómetro de electromovilidad de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac)
Este indicador valora la penetración de los vehículos electrificados y la instalación de infraestructuras de recarga de acceso público. Según los datos del segundo trimestre del año, nuestro país creció 0,9 puntos en movilidad eléctrica en el segundo trimestre de 2022, hasta situarse en 14,2 puntos sobre 100. Pero esta cifra se queda lejos del crecimiento del conjunto de los países europeos, que suben 1,1 puntos de media y cierran el trimestre con una valoración de 29,1 puntos, casi 15 puntos de diferencia con España.
A la cola en movilidad eléctrica
«España se encuentra a la cola respecto al resto de los principales países europeos. Este barómetro pone de manifiesto la necesidad de acelerar el ritmo tanto en penetración de vehículo electrificado como en despliegue de puntos de recarga. A esta velocidad no llegamos a alcanzar los objetivos de descarbonización marcados por Europa y establecidos por el PNIEC, que fijan para 2030 un parque de tres millones de turismos electrificados», ha dicho José López-Tafall, director general de Anfac.
Desde la Asociación de Fabricantes instan al Gobierno a que tome en cuenta propuestas que permitan mejorar en materia de movilidad eléctrica. Consideran necesario «definir unos objetivos públicos vinculantes para el despliegue calendarizado por año y potencias de los puntos de recarga y hacer realidad que un nuevo poste de carga en la vía pública funcione en menos de seis meses, como también favorecer la fiscalidad positiva del vehículo electrificado y simplificar y unificar los trámites del MOVES III».
El mercado del vehículo eléctrico
En lo que se refiere al mercado del coche eléctrico, con un total de 38.124 turismos electrificados matriculados hasta el segundo trimestre, España solo ha logrado llegar al 31,8% de las 120.000 unidades que Anfac estima deberían venderse en 2022 para lograr los objetivos reflejados en el PNIEC para 2030. Para alcanzar esta meta, hasta junio se tendrían que haber vendido cerca de 60.000 unidades.
En este sentido, durante el segundo trimestre de 2022, España ha alcanzado una valoración de 22,7 puntos sobre 100 en el indicador de penetración de vehículo electrificado, que representa un crecimiento de 1 punto, y un incremento menor respecto al periodo anterior.
Lento despliegue de la red de carga
En cuanto a la red de cargadores, «continúa el lento desarrollo de infraestructuras de recarga tanto en España como en la mayoría de los países del entorno europeo», señala Anfac. Lo que sí ha mejorado es la red pública, con 1.528 puntos nuevos en el segundo trimestre de 2022, lo que lleva a un total de 15.772 puntos de recarga de acceso público. Para lograr el objetivo marcado por el PNIEC sería necesario alcanzar 340.000 puntos de recarga en 2030.
En nuestro país destaca la evolución de Navarra y La Rioja, que mejoran en 3 y 2 puntos, respectivamente. En el primer caso la mejora se vincula esencialmente al despliegue de puntos de recarga públicos de alta velocidad, ocupando Navarra la primera posición.
Por otro lado, aunque el total de los cargadores ha aumentado, la mayoría de los puntos de recarga públicos son de carga lenta (potencias iguales o inferiores a 22kW). Tan solo el 17% de la infraestructura de recarga de acceso público en España corresponde a carga con potencia superior a 22 kW, aunque cabe destacar que durante el primer semestre del año cerca de la mitad de los puntos de recarga que se han instalado en la red pública son de potencia superior a 22 kW.