Se sabía desde hace tiempo que la compañía croata Rimac Automobili estaba buscando alcanzar una gran proeza con su sensacional Rimac Nevera. Y finalmente se han pronunciado al admitir que este deportivo se ha convertido en el vehículo eléctrico de producción más rápido del mundo. Y es que han alcanzado la friolera de 412 km/h de velocidad punta… en absoluto silencio.
Para conseguir esta extraordinaria cifra, este Rimac Nevera fue pilotado por Miro Zrnčević, que exprimió al máximo la mecánica eléctrica de este bólido en la pista de pruebas Automotive Testing Papenburg en Alemania, que es famosa en el mundo entero por estar formada por dos rectas de 4 kilómetros de longitud. El hipercoche se configuró en el modo de velocidad máxima, que coloca sus apéndices aerodinámicos en una posición perfecta para reducir al máximo la resistencia al avance, de la misma manera que permite ofrecer la carga aerodinámica en unos niveles adecuados para garantizar la estabilidad.
Los Rimac Nevera se limitan a 350 km/h
El Rimac Nevera salió del peralte de la pista Automotive Testing Papenburg (raro que no usaran el trazado de Ehra Lessien, ahora que Rimac ha pasado a formar parte del Grupo Volkswagen) a una velocidad de 250 km/h, para pisar a fondo hasta llegar a los mencionados 412 km/h a final de recta. Y estos datos han sido verificados según la compañía croata por un sistema de medición GPS Racelogic V-Box.
Además de ser la velocidad más elevada medida en un vehículo eléctrico de producción, esos 412 km/h también se han convertido en la velocidad más alta alcanzada en este trazado de Automotive Testing Papenburg.
El Rimac Nevera es más rápido que un Bugatti Veyron
Para ponerlo en perspectiva hay que decir que esta velocidad máxima es superior a los 407 km/h que alcanzó el Bugatti Veyron allá por el año 2005, pero también es una velocidad inferior a los 490,48 km/h que firmó el todopoderoso Bugatti Chiron Super Sport 300+ en 2019. También es menos que los 474,8 km/h que alcanzó el sensacional SSC Tuatara, que ostenta el actual récord al tratarse de una velocidad media medida en dos sentidos.
Miro Zrnčević, jefe de pruebas y desarrollo de la compañía croata, probablemente conoce este Rimac Nevera mejor que nadie en el mundo. Tras el intento exitoso, dijo: «Viajar a 412 km/h, o 256 mph, significa viajar a un tercio de la velocidad del sonido… He conducido este Rimac Nevera desde que giró una rueda por primera vez y vi el auto perfectamente pulido. Hoy es un momento realmente emotivo. Lo más importante que aprendí durante el intento de velocidad máxima es cuán compuesto y estable era el automóvil, lo que confirma que nuestros equipos de aerodinámica y dinámica del vehículo han hecho un trabajo increíble».
Neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2R para este Rimac Nevera
Un elemento fundamental a la hora de alcanzar dicha velocidad han sido sus neumáticos. Para ello la casa croata ha equipado su Rimac Nevera con unos extraordinarios Michelin Pilot Sport Cup 2R, los cuales fueron debidamente revisados por técnicos de la marca francesa antes de montarse en sus ligeras llantas. Rimac asegura que esta unidad no tiene ninguna variación si se compara con las unidades que llegan a manos de sus clientes, aparte de haber eliminado el limitador de velocidad que forma parte de su dotación de serie y que le corta las alas a 350 km/h con el fin expreso de salvaguardar la integridad de sus neumáticos.
Aún así, Rimac dice que todos sus Nevera pueden alcanzar la velocidad máxima de 412 km/h en «eventos especiales para clientes con el apoyo del equipo de Rimac y bajo condiciones controladas».
Sus cuatro motores eléctricos proporcionan 1.914 CV
Decir que este extraordinario vehículo eléctrico está equipado con cuatro motores eléctricos que son capaces de generar una potencia conjunta de 1.408 kW, el equivalente a 1.914 CV. También esos cuatro motores son capaces de proporcionar hasta 2.360 Nm de par motor, todo ello alimentado por medio de una batería con 120 kWh de capacidad.
Además de hacerse con el récord de velocidad máxima más alta entre los vehículos eléctricos, el Rimac Nevera también tiene el privilegio de haberse convertido en el vehículo de producción con la aceleración más rápida al efectuar el primer cuarto de milla de 8,582 segundos en 2021.