¿Quieres deshacerte de tu viejo coche y no sabes cómo hacerlo? Si tu vehículo ha llegado ya al final de su vida útil, es decir, si vas a dejar de circular con él, es obligatorio darlo de baja de forma definitiva en el Registro de Vehículos de la DGT. Es un trámite gratuito que implica, si se trata de una baja ordinaria, la retirada de la circulación de ese coche y su posterior destrucción.
Existen tres tipos de bajas definitivas para vehículos –ordinaria, por traslado a otro país y para vehículos históricos–, además de una baja temporal que puedes solicitar si tu vehículo va a estar parado mucho tiempo, pero quieres conservarlo. Además, tienes que tener en cuenta que no podrás tramitar la baja del vehículo si existe un precinto sobre el mismo, que tendrás que cancelar previamente.
Estos son los trámites que tienes que realizar para solicitar la baja definitiva de tu vehículo y la documentación a aportar.
1Baja ordinaria de tu vehículo
Si quieres proceder a la baja definitiva de un vehículo debes llevar el coche a un desguace o Centro Autorizado de Tratamiento de vehículos. Allí se encargarán del trámite y te entregarán un justificante de baja permanente del coche, previo informe a la DGT, y el certificado de destrucción del mismo. No es necesario que acudas a las oficinas de Tráfico en ningún momento.
Para dar de baja tu coche necesitarás entregar el vehículo que vas a dar de baja en el desguace y aportar la documentación original del coche (permiso de circulación y tarjeta de ITV). En el caso de que el titular del vehículo hubiera fallecido será necesario, además del permiso de circulación del coche, presentar una declaración responsable para baja definitiva de un vehículo por fallecimiento de su titular, que podrás descargar en la web de la DGT.