Muchos de los vehículos nuevos que salen de las factorías de Audi se entregan con combustible ecológico R33. Tras la transición de las estaciones de servicio de los centros de producción al R33 Blue Diesel el año pasado, ahora también se ha implementado el R33 Blue Gasolina. De esta forma, Audi contribuye a la reducción de la dependencia de los combustibles fósiles para alcanzar los objetivos climáticos.
Desde marzo de 2021 las estaciones de servicio de Audi en las factorías de Ingolstadt y Neckarsulm suministran combustible ecológico R33 Blue Diesel. Como complemento, el R33 Blue Gasolina sustituye ahora a la gasolina convencional E10.
Biocombustibles de segunda generación
El R33 Blue Gasolina y el R33 Blue Diésel constan de un tercio de componentes renovables, basados exclusivamente en materiales residuales y de desecho. Se trata, por lo tanto, de biocombustibles de segunda generación.
La parte renovable de la gasolina consiste en un 10% de combustibles oxigenados como el etanol y un 23% de bionafta, que se obtiene de materiales residuales como el talloil, un subproducto de la producción de pasta de papel. El R33 Blue Diésel se compone de un 26% de combustible parafínico renovable, es decir, HVO (aceite vegetal hidrotratado), y un 7% de biodiésel; el 67% restante está compuesto por combustible fósil.
Los combustibles sostenibles R33 Blue reducen las emisiones de CO2 en al menos un 20% en comparación con el gasóleo y la gasolina fósiles en el análisis ‘well-to-wheel’ (del pozo a la rueda), y la cifra va en aumento.
Neutralidad en carbono para 2025
Al financiar proyectos medioambientales certificados, los productores de combustible mejoran aún más el impacto medioambiental de los componentes fósiles restantes en los combustibles R33 Blue. Dentro de la estrategia de reducción del efecto global de los gases de efecto invernadero, el uso de este tipo de combustibles es un paso importante hacia el objetivo de Audi de alcanzar la neutralidad de carbono en sus centros de producción para 2025.
El combustible R33 Blue Gasolina cumple la norma DIN EN 228 aplicable a la gasolina, lo que significa que cualquier vehículo homologado para funcionar con gasolina Súper 95 E10 puede utilizarlo.
El R33 Blue Diésel cumple la norma más extendida en la actualidad, la EN 590, por lo que está certificado para todos los vehículos diésel, incluso los más antiguos. Los combustibles R33 son de primera calidad y tienen un efecto positivo sobre la vida útil del motor gracias a su aditivación especial.
Más limpios y protegen el motor
Ambos han obtenido resultados positivos constantes en pruebas exhaustivas de motores y vehículos; incluso superan la norma EN 228/E10 en parámetros clave como la estabilidad de almacenamiento y el comportamiento de ebullición. Los aditivos de alta calidad también garantizan que estos combustibles renovables sean muy limpios y eviten la corrosión del motor.
Los combustibles R33 se han desarrollado en colaboración con Shell y Bosch. Audi y el Grupo Volkswagen aportan sus conocimientos técnicos para, en colaboración con los fabricantes de aceites minerales y proveedores de energía, garantizar la compatibilidad de los motores existentes con los combustibles renovables, conocidos como reFuels.
Además de las estaciones de servicio de Audi, Volkswagen y Bosch, el R33 Blue Diesel ya está disponible en las gasolineras públicas. Sin embargo, la gasolina Súper E10 y el gasóleo con un contenido de biodiésel de hasta el 7% (indicado con el símbolo B7) siguen siendo los combustibles estándar en Alemania.
No requieren ajustes de hardware
Los fabricantes de aceites minerales también tienen previsto utilizar R33 Blue Gasolina en la red de gasolineras existente. El uso de reFuels no requiere ningún ajuste de hardware en las estaciones de servicio.
Con su estrategia ‘Vorsprung 2030’ Audi apuesta por la movilidad eléctrica con baterías. Los combustibles renovables son un complemento, al permitir que los motores de combustión interna sean más respetuosos con el clima.
Constituyen un medio eficaz de defosilización, tanto a corto plazo como a partir de 2033, cuando la marca de los cuatro aros tiene previsto dejar de producir motores de combustión en Europa. En el futuro, Audi y el Grupo Volkswagen tienen previsto utilizar más combustibles renovables en sus vehículos para ayudar a reducir la huella de carbono de la flota actual.
Audi utiliza combustibles R33 en Ingolstadt y Neckarsulm. Repostar la flota de vehículos de empresa con combustibles renovables contribuye a reducir aún más las emisiones de CO2, puesto que las emisiones de estos vehículos también se contabilizan entre las emisiones totales de una fábrica. Esto permite avanzar en el objetivo de Audi de conseguir que sus centros de producción sean neutros en carbono neto para 2025.