La 45ª edición del Dakar será la más larga desde 2014, cuando se celebraba en territorio sudamericano. Desde el Mar Rojo a la costa este, se cubrirán un total de 8.549 kilómetros de los cuales la mitad (4.706 kilómetros) serán cronometrados, a través de catorce etapas, con la vuelta al famoso e inmenso desierto Empty Quarter. Y al igual que también será la más larga, posiblemente también sea la más disputada de las últimas ediciones. Porque será una lucha a muerte a tres bandas.
La prueba más dura del mundo, además, ofrece uno de los mayores desafíos y alicientes de los últimos tiempos. Porque Audi y su vehículo híbrido, por primera vez y a decir de sus pilotos, opta a hacer historia y arrebatar el trono a Toyota, ganadora de la pasada edición y del Campeonato del Mundo de Raids en 2022, ambas victorias con Nasser Al Attiyah y Mathieu Baumel.
“Es una ruta en la que hemos trabajado para que sea un poco más difícil que en años anteriores”, explicaba el director de la prueba, David Castera. “La primera semana será como el Dakar que hemos conocido hasta ahora, con dunas, arena, rápido, técnico, con la particularidad de que son muchos más kilómetros, es mucho más de lo que hemos conocido hasta ahora”. Los organizadores han querido cambiar sustancialmente el recorrido respecto a anteriores ediciones, intentando encontrar el recorrido ideal para las condiciones que ofrecer Arabia Saudí y dotar de un mayor atractivo a la prueba respecto a ediciones anteriores.
Audi llega a este Dakar con posibilidades de victoria
“En la segunda semana cambiamos totalmente el ritmo. Pasamos de etapas largas en kilómetros a etapas cortas en kilometraje, con muchas dunas, pero cambiará la configuración del Dakar. Son más de 200 kilómetros por día, que parece poco, aunque son puras dunas. Es la primera vez que hacemos una ruta tan diferente entre las dos semanas”. Las etapas maratón, sin asistencia externa para los participantes, llegarán en el territorio de Empty Quarter
Junto al recorrido, la vertiente competitiva también se presenta más intensa. Toyota, en plena madurez de su proyecto dakariano, se enfrenta al segundo asalto de Audi al Dakar con su RS Q e-tron2. Por prestaciones, la máquina alemana es clara favorita para lograr la victoria si la fiabilidad o los imponderables de la prueba o la navegación no se interponen. De hecho, días antes de la prueba, Sebastian Loeb señalaba como gran favorito a la marca alemana. Por ello, la compañía japonesa ha preparado este Dakar a conciencia. Entre otros factores, con la presencia en la Campeonato del Mundo durante todo este año, a diferencia de Audi desarrollando una máquina ya de por sí ultra competitiva. Por si no fuera suficiente, el fabricante japonés ya ha avanzado que participará de nuevo en el Campeonato del Mundo de 2023. Solo falta esperar que Audi recoja el guante para el resto de la temporada. Antes, el Dakar.
Para preparar la prueba, y durante este año, Toyota ha llevado a cabo más de 25.000 de carreras y prueba, un porcentaje importante de ellos, en competición.
En este apartado, supera a Audi, que ha llevado a cabo el desarrollo del e-tron2 fundamentalmente en tests privados y sin comparación directa con los dos equipos rivales, Toyota y Bahrein (Prodrive). Con la excepción del Rallie de Marruecos, cuya participación tuvo lugar fuera de la clasificación oficial. Con todo, los coches alemanes fueron, extraoficialmente, los ganadores de la carrera. Eso sí, los Audi salían siempre por detrás de sus rivales, algo que no sucederá en el Dakar. De modo que las referencias comparativas son relativas, aunque más optimistas para la marca alemana que el pasado año. “Estamos más confiados, más tranquilos y con menos dudas”, reconocía a pesar de todo Carlos Sainz antes de partir para Arabia Saudí.
Toyota ha probado más a fondo su coche que Audi para el Dakar
Sobre el papel las categorías T1+ y la T1.U (en la que se integra Audi, destinada a vehículos con energías alternativas de combustión) están ahora relativamente más igualadas en prestaciones que en la pasada edición. Así al menos debían pensar los organizadores del Dakar, o incluso estaban de acuerdo con el pronóstico de Loeb que recientemente aplicaron una reducción de potencia y aumento de peso al coche alemán. Con 40 CV menos, el e-tron2 contará con 100 kilos más de peso mínimo (no lleva la misma cantidad de combustible), factor que desde Audi, se considera, supone una desventaja, sobre todo en frenadas, tracción, y zonas de pista sinuosa.
Para el ASO (organizador del Dakar) la entrega inmediata de potencia del e-tron2 beneficia su rendimiento, así como su menor carga de combustible, ya que cuenta con tres motores eléctricos y uno de combustión que hace de generador para recargar las baterías eléctricas que suministran energía a aquellos. “El año pasado, todos los coches pesaban lo mismo, tenían la misma potencia y recorrido de suspensión, pero los híbridos y eléctricos ganan 100 kilos ahora. En cualquier caso, nos hubiera costado mucho bajar eso, y es difícil entender cómo lo hace la normativa con un coche así”, apuntaba Carlos Sainz.
Al Atiyyah, Giniel de Villiers Henk Lategan formarán el tridente de Toyota, mientras que Audi repite con Carlos Sainz (ganador de la primera victoria para un vehículo alternativo en 2023, además de Stéphane Peterhansel, que buscaría su decimoquinta victoria y su triunfo parcial numero 50, con lo que lograría el desempate con el piloto que hasta el año pasado ostentaba el récord en la historia de la prueba, Mathias Ekström será el tercer piloto en liza. El mejor Audi en la edición de 2022 fue Carlos Sainz, noveno.
No hay que perder de vista a BRX Hunter en este Dakar
El tercero en discordia será el equipo Bahrein de Prodrive y el BRX Hunter, encuadrado en la misma categoría que Toyota. Durante todo 2022 el equipo británico ha disputado el Campeonato del Mundo de Raids con Sébastien Loeb al frente, por lo que el francés llegará mejor preparado que nunca para conseguir su primera victoria en la que ya es su séptima participación en una prueba que siempre se le ha resistido. Estará acompañado por Orlando Terranova y por Guerlain Chicherit, aunque este último con su propio equipo. La enfermedad de Nani Roma, un cáncer que ha superado en 2022, le ha impedido estar presente en esta edición por primera vez en 27 años.
El Hunter es favorito para la victoria por primera vez desde su estreno hace dos años, ya que Prodrive ha llevado a cabo un intenso plan de trabajo esta temporada en una montura cada vez más rápida y fiable. Desde sus inicios arrancó con un biocombustible especial desarrollado por una compañía británica, derivado de fuentes renovables, y que ya ha demostrado que puede optar a la victoria por su rendimiento en el Hunter. Su intenso duelo durante este año en el campeonato con Toyota también augura un duelo a tres para esta próxima edición.
Una de las últimas sensaciones semanas antes de comenzar la prueba fue la presentación del nuevo John Cooper Works Rally Plus, en la categoría T1+, adaptado a la categoría y para ofrecer mayores prestaciones a sus pilotos `cliente’. Su nueva carrocería, inspirada en la de Audi en ciertos aspectos, e incorpora ruedas más grandes y un mayor recorrido de suspensión. Kuba Przygonski y Sebastian Halpern serán sus pilotos, quienes optarán a entrar fácilmente entre los diez primeros.