Lynk & Co está superando sus expectativas en el mercado español, hasta el punto de que nuestro país se ha convertido en uno de los tres más importantes para la empresa en Europa.
La marca, propiedad de la china Geely y cuyos coches cuentan con tecnología Volvo, ha multiplicado casi por seis su número de miembros en nuestro país y en 2022 alcanzó los 19.600 usuarios. Lynk & Co ha convertido en un éxito sus soluciones de movilidad flexible y en Europa un 200% más de usuarios se unieron el año pasado, pasando de 60.000 a más de 170.000 miembros en siete mercados: Países Bajos, Suecia, Alemania, Francia, Italia, Bélgica y España.
Lynk & Co no es la típica marca de automóviles. Ofrece su híbrido 01 en alquiler, con una suscripción mensual, que incluye mantenimiento, seguro e impuestos en un precio fijo. Y da la posibilidad de compartir el coche con otros usuarios, reduciendo la cuota mensual, por lo que ofrece total flexibilidad. Según explican, su objetivo «no es vender más coches sino hacer un mejor uso de menos vehículos».
Lynk & Co ya tiene club en España
La marca acaba de abrir en Barcelona, en pleno Passeig de Gràcia, su primer club de España y el noveno de Europa. Las instalaciones son las más grandes inauguradas por Lynk & Co, no son un concesionario al uso y pretenden ofrecer una experiencia diferente. Además, preparan la apertura de otro club similar en Madrid para este año y ampliarán su presencia en el sur de Europa con un nuevo centro de atención al cliente y nuevas oficinas.
En un contexto en el que cada vez más gente quiere disfrutar de un vehículo sin tenerlo en propiedad, las cifras de la compañía son abrumadoras: cuentan a nivel nacional con 19.600 miembros, un 460% más que en 2021 (3.500), y con 2.700 coches en las calles españolas, frente a los 560 de un año atrás.
Coches compartidos
«España es un mercado vibrante y estamos abrumados por la aceptación que está teniendo la marca y su disruptivo modelo de negocio. Con nuestra suscripción en modalidad de todo incluido esperamos aportar a nuestros miembros simplicidad radical, a la par que una solución de sostenibilidad y flexibilidad a la industria del automóvil», ha asegurado el consejero delegado de Lynk & Co, Alain Visser.
Además, la compañía lanzó el pasado año su servicio de ‘car sharing’, que se espera pueda activarse en España en los próximos meses y que permite compartir el coche con quien se quiera, decidiendo la tarifa a cobrar, la disponibilidad, el lugar de recogida y la devolución del mismo, según convenga al arrendatario. No es necesario entregar las llaves, ya que se da acceso al vehículo cómodamente desde la aplicación de Lynk & Co.
Este servicio se gestiona a través de una app, en la que el usuario/propietario se da de alta para empezar a recibir solicitudes de arrendamiento del coche, que podrá aceptar o rechazar. Cada 7-14 días, el dinero que haya obtenido al compartir tu coche se transferirá a la cuenta bancaria que tenga registrada.
Otra de las ventajas de este sistema es que los propietarios tienen contratado el seguro de Lynk & Co y todos los suscriptores mensuales disponen de seguro. Esto significa que tanto la persona que alquila el coche (arrendatario) como la persona que lo comparte (arrendador) están cubiertas por el seguro al usar la plataforma de car sharing de Lynk & Co.
Una plantilla en aumento
Además del incremento de usuarios en España, la empresa también crece en trabajadores e incrementó su plantilla más del doble el año pasado con 340 nuevos empleados en todo el mundo, hasta los casi 800 empleados actuales. «Un equipo que está formado por un 45% de mujeres, una proporción notablemente más equilibrada que la media del sector», explican.
«Nos dedicamos a crear una sociedad más justa, progresista y sostenible. Utilizamos electricidad 100% renovable en nuestras siete oficinas y en todos nuestros clubes, y estamos cambiando hacia la electricidad renovable en toda nuestra cadena de operaciones. También trabajamos para reducir la huella del ciclo de vida de nuestros coches, aumentar la proporción de materiales sostenibles y establecer el uso compartido del coche como la nueva normalidad», ha añadido Visser.
