Corría el mes de junio del pasado año cuando la compañía italoargentina presentaba al mundo entero uno de los Pagani Huayra más exclusivos de la historia. Se trataba de su impresionante Codalunga, una versión especial que el bueno de Horacio Pagani quería llevar a la producción en forma de edición limitada a dos piezas. Sin embargo, tales fueron los revuelos que levantó entre los apasionados de la marca que finalmente accedió a ensamblar cinco piezas. Este que ahora tienes ante tus ojos es el segundo de los Pagani Huayra Codalunga que serán realidad.
Esta versión tan especial del sensacional superdeportivo de la compañía nació porque sus clientes más importantes y acaudalados querían un vehículo aún más especial que el Pagani Huayra. Ellos deseaban una versión con una carrocería específica al más puro estilo de las versiones LongTail de la compañía de Woking. Entonces la división Gradi Complicazioni de la marca se puso manos a la obra para desarrollar esta maravilla.
La zaga del Pagani Huayra Codalunga se estira 360 milímetros
A simple vista podría parecer que este Pagani Huayra Codalunga está acabado en el mismo color que la firma italoargentina utilizó allá por el año 2011 para presentar su Huayra original. Un tono también semejante al que acaban de utilizar en la presentación de su última maravilla, el Pagani Utopia. Sin embargo esa escultural carrocería, que ha sido estirada unos 360 milímetros en su zaga respecto a un Huayra original, no está pintada, sino que se trata de fibra de carbono teñida. En ese exterior destacan tres discretas líneas (la central de mayor grosor) en la parte final de su carrocería que dejan ver el material con que está fabricada su carrocería.
En este Pagani Huayra Codalunga también destacan sus llantas plateadas, tras las que se esconden unas pinzas de freno en color bronce. Y estas muerden sus discos de material carbocerámico.
Un interior como el del resto de los Pagani Huayra
El interior de esta maravilla también se ha personalizado para la ocasión. Cierto es que el habitáculo del Pagani Huayra Codalunga es calcado al de cualquier otro, aunque aquí se ha utilizado suave cuero natural con aspecto envejecido para vestir sus asientos, consola central, paneles de las puertas, volante… Tampoco podía faltar el inconfundible aluminio cepillado que usa la marca, además de piezas en fibra de carbono. Si bien, el elemento más significativo es el pomo de madera que adorna el selector del cambio.
Mecánicamente es cierto que no hay sorpresas, porque este Pagani Huayra Codalunga esconde el sensacional 6.0 V12 Biturbo que los chicos de Mercedes-AMG fabrican específicamente para los modelos de la casa italoargentina. Eroga 840 CV de potencia y 1.100 Nm de par motor, siendo el único componente diferente al resto de los Huayra el sistema de escape fabricado en titanio y adaptado para recorrer ese extra de carrocería.
Sólo cinco unidades a siete millones la pieza
Cada una de estas maravillas ya tiene dueño, quien ha tenido que pagar la friolera de siete millones de euros sin impuestos por cada pieza. Toda una fortuna que multiplica por tres el precio original de un ‘mundano’ Huayra.
