Los patinetes eléctricos han sido elegidos por muchos urbanitas como su forma favorita de recorrer diariamente ciertos trayectos en ciudad. Su uso no ha sido potenciado por las administraciones y, pese a ello, cada vez tiene más presencia en las calles. Esta forma de transporte 100% eléctrica es ideal por su comodidad, rentabilidad y versatilidad.
La popularización del patinete eléctrico es la prueba viva de cómo una forma de transporte cómoda y sostenible se puede generalizar por elección de los consumidores y no por imposición. Las empresas se han apuntado a esta tendencia tan popular y cada vez proliferan más empresas de alquiler de patinetes, que simplifican aún más esta forma de movilidad. Sin embargo, pese a su alta demanda hay una ciudad europea que podría ser la primera en prohibir estos dispositivos.
1Madrid es la ciudad de Europa donde más patinetes compartidos se utilizan
El patinete está sirviendo para minimizar la utilización del coche particular y Madrid es el mejor ejemplo de ello. Casualmente, la capital española es la ciudad de la Unión Europea donde más se utilizan los patinetes eléctricos compartidos. Según un estudio de Tier Mobility España es el país europeo donde hay más usuarios de micromovilidad: el 30% de los españoles utiliza este tipo de vehículos de movilidad personal.
A parte de comprar un patinete en propiedad, la opción de utilizar patinetes de alquiler es muy popular en las ciudades donde se dispone de esta posibilidad. En Madrid cerca del 43% de los ciudadanos declara haber usado los patinetes eléctricos compartidos. Esta es la cifra más alta de Europa. Después de Madrid, los países donde más demanda tiene este tipo de movilidad son Italia y Francia. Pese al gran interés por esta forma de movilidad, la ciudad de París está pensando en prohibir el uso de los patinetes compartidos.